Hallaron tres muertos en Córdoba e investigan un doble crimen y suicidio
Madre e hija fueron encontradas muertas, con signos de estrangulamiento, y un hombre, pareja de la mujer, apareció fallecido, colgado de una cuerda, en una casa de una localidad cercana a la capital cordobesa, y se investiga si se trató de un doble crimen seguido de suicidio.
Fuentes policiales informaron que el hallazgo de los tres cadáveres ocurrió anoche, dentro de una vivienda ubicada en calles Deán Funes y Formosa, en la localidad de Sebastián Elcano, unos 170 kilómetros al norte de Córdoba Capital.
Se trata de una población de unos 2.500 habitantes, situada sobre la ruta provincial 21, a la altura del departamento cordobés de Río Seco.
Según las fuentes, dentro de la casa se halló primero a un hombre, identificado como Miguel Angel López (27), colgado de un tirante del techo, con una soga alrededor de su cuello.
Mientras que en otra habitación de la casa fueron encontrados los cuerpos de Analía Figueroa (29) y su hija de 10 años, con signos de asfixia por estrangulamiento, dijeron los informantes.
Las fuentes señalaron que el hombre, que trabajaba como peón de campo, era el concubino de la mujer pero no el padre de la niña muerta.
Tras hallar a los fallecidos, personal policial de la Jefatura Departamental de Río Seco trasladó los cuerpos a la Morgue Judicial para que se les practique la autopsia y determinar la mecánica de la muerte.
La principal sospecha de los investigadores apunta a que el hombre mató a su concubina y a la hija de ésta y luego se suicidó, aunque no descartan otras hipótesis.
"Esto sucedió en la intimidad de un hogar. Estamos investigando y efectuando averiguaciones entre los vecinos del pueblo para determinar cuál habría sido el móvil de este hecho, que ha causado conmoción", aseguró el comisario Carlos Trevisiol, de la departamental Río Seco de la Policía de Córdoba.
La investigación está a cargo del personal de la Fiscalía de Instrucción de Deán Funes y de la Policía Judicial que se encargó del levantamiento de huellas y rastros en el lugar del hecho.
"Esto ha estremecido al pueblo, porque no es algo que sucede todos los días. El hombre trabaja en los campos y era una familia humilde", añadió el comisario Trevisiol.