Hacete la película: 5 documentales para ver antes de morir
Estos días de frío son propicios para darle una oportunidad al, probablemente, género más subestimado y prejuzgado por parte de los fanáticos del pochoclo.
Por Sofía Tarruella
@Sofisuu
Los documentales son probablemente el género más subestimado y prejuzgado por parte de los fanáticos del pochoclo, sin embargo existen un sinfín de joyitas esperando a ser descubiertas.
Elegir 5 es casi imposible pero, acostumbrada a los desafíos, dejo reseñas de algunos de esos filmes que realmente valen la pena y que vienen como anillo al dedo para ponerse al día en estos días de frío.
-La Cueva de los Sueños Olvidados (Cave of Forgotten Dreams) de Werner Herzog
El genio de los documentales (y ficciones) Werner Herzog anticipa lo que serán los viajes del futuro: una muestra realista e intima de increíbles lugares filmados en 3D, tal como si fuéramos protagonistas directos de una excursión privilegiada.
El director es el guía en este viaje por las pinturas rupestres de la Cueva de Chauvet, en el departamento de Ardèche (Francia). Un increíble lugar descubierto accidentalmente en 1994 que, gracias a un derrumbe en la entrada, permitió que se conservasen inalterados cientos de las más antiguas pinturas rupestres conocidas.
- Pina de Wim Wenders
Similar al estilo de explosión visual realista 3D que en La Cueva de los Sueños Olvidados, el guionista, productor, actor y director de cine alemán retrata mediante un despliegue de danza y color, la vida de una de las grandes figuras del ballet internacional contemporáneo, Pina Bausch.
El espectador es ahora parte de la audiencia en un espectáculo visualmente deslumbrante del elenco del Tanztheater Wuppertal Pina Bausch, tanto por teatros como exteriores de la ciudad y alrededores de Wuppertal, donde Pina consolidó su prolífica carrera.
-Baraka de Ron Fricke
El director muestra en su mejor obra porque es reconocido como uno de los maestros en la dirección fotográfica para cine.
En 24 países y sin diálogo, construye una película, que pese a lo que uno pueda presumir por esta escueta descripción, es atrapante interesante y entretenida.
Se trata de una catarata visual que mediante colores, música y sonidos reflexiona sobre las complejas y tóxicas relaciones entre los seres humanos y la naturaleza, a través del tiempo.
-Waltz with Bashir de Ari Folman
No se necesitan sólo imágenes filmadas reales para hacer un documental. El director de este filme contó una vez que para poder expresar su propia experiencia como parte del ejército israelí durante la primera guerra con el Líbano, en 1982, precisaba trascender las imagen real y por eso decidió contar su historia con animaciones.
A partir de una recurrente pesadilla, el realizador decide reconstruir sus recuerdos y con testimonios de viejos amigos y antiguos compañeros, entenderá porque había olvidado -o creía haber olvidado- su pasado.
-La isla de las flores
En menos de 13 minutos este genial cortometraje muestra con cruel ironía la realidad de la sociedad brasileña de los años 80, la desigualdad social y la miseria del ser humano en su máxima expresión.