Habló una expareja del policía que mató a Úrsula Bahillo en Rojas: “Le pegaba a su mamá y se acostaba con su abuela”
Es una de las mujeres que lo denunció en la Justicia. En diálogo con TN, dijo que el policía bonaerense es “un psicópata” y afirmó que abusó sexualmente de una nena con discapacidad.
Belén Miranda, una expareja y víctima del principal sospechoso de haber asesinado a Úrsula Bahillo, contó este martes que, antes del femicidio, se había reunido con la joven para intentar ayudarla. Dijo que Matías Ezequiel Martínez, que es oficial de la Policía bonaerense y se encuentra detenido, es “un psicópata” que, durante el tiempo que estuvieron juntos, la esperaba afuera de su casa con el patrullero para controlar lo que hacía. Afirmó que “le pegaba a su mamá y a sus hermanas” y que “mantenía relaciones sexuales no consentidas con su abuela”. Además, denunció que “violó a una nena con discapacidad”.
“Él quiso matarme a mí y a mis hijos con su arma de trabajo”, contó este martes la joven, que es una de las tres mujeres que denunciaron en la Justicia a Martínez por violencia de género. La semana pasada, se había reunido con Úrsula, que la había contactado a través de las redes sociales y le había pedido encontrarse para conversar sobre lo que estaba viviendo. “Me dijo: ‘Si me matan, ya sabés quién fue’”, afirmó en diálogo con TN.
Expresó que “tiene miedo” y aseveró que el femicidio de Úrsula “podría haberse evitado”. “¿Cuántas denuncias más se necesitaban?”, cuestionó. Contó que, la semana pasada durante el encuentro que mantuvo con la joven, le mostró “mensajes y fotos de las marcas que tenía en el cuerpo por los golpes que él le daba”. Dijo que le aconsejó que hiciera la denuncia en la Justicia y que pidiera custodia policial o un botón antipánico, algo que no quería hacer porque Martínez “la tenía amenazada”.
Un día después de ese encuentro, el viernes 5 de febrero, Úrsula denunció por hostigamiento al ahora detenido. La Justicia le había impuesto una orden de restricción, pero el lunes, tras una fuerte discusión, la habría atacado con un cuchillo. El cuerpo fue encontrado en la zona rural de Guido Spano. Tras el crimen, según detalló el portal Hoy Rojas, el hombre habría intentado suicidarse con el mismo cuchillo, por lo que al detenerlo lo trasladaron al hospital Unzué.
Miranda estuvo un año en pareja con Martínez, en 2017. En ese tiempo, según contó, fue víctima de “maltrato verbal y psicológico”. “Era muy psicópata, se volvía loco cuando salías sin él”, recordó. Aseguró que se quedaba afuera de su casa con el patrullero y que “entraba cuatro o cinco veces por noche” para controlar que estuviera dormida.
Los múltiples episodios de violencia que vivió la llevaron a denunciarlo en la Justicia y también con un escrache público en las redes sociales. “Todos los años publiqué lo que me había pasado. Recién el 18 tenía una audiencia judicial”, explicó y agregó que Úrsula “le había deseado que saliera todo bien ese día”.
Tras viralizarse su historia, Miranda conoció a “cuatro víctimas más que no hicieron la denuncia, a Úrsula y a la mamá de una nena con discapacidad” oriunda de Azul que “él violó” y que también había llevado el caso a la Justicia. Los testimonios que apuntaban contra el policía por violencia de género se multiplicaron. En ese sentido, la joven contó que, en el último tiempo, se enteró de que el acusado “le pegaba a su mamá y a sus hermanas y se acostaba con su abuela”. “Mantenía relaciones sexuales no consentidas con ella, que siempre lo cubría”, sostuvo.
Martínez quedó detenido este martes en sede policial a disposición de la Justicia, acusado de “homicidio calificado por violencia de género”. El agente solía cumplir sus funciones en el Destacamento de San Nicolás pero estaba con licencia psiquiátrica desde hacía cinco meses, según informaron medios locales.
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