Habló la novia del motochorro asesinado en Moreno: “Lo mataron como a un perro, el policía tiene que pagar”

La novia de Andrés Carbonel, el asaltante asesinado por el sargento Lucas Mallea tras el robo de su moto en Moreno, dio una entrevista y dijo: “Me lo mataron como a un perro". Además, se refirió a Mallea, quien ya fue liberado luego de disparar al menos cuatro veces contra Carbonel, y afirmó que “tiene que pagar”, dado que “lo mató porque quiso”.

La joven, llamada Rocío, informó que su pareja sufría de consumo problemático de sustancias y contó que se enteró de la muerte de Carbonel a través de las imágenes transmitidas por televisión, obtenidas por la cámara de seguridad instalada en la parada de colectivos, frente a donde se dio el asalto.

"Me desperté y tenía mensajes de mi cuñada, de mi hermano, diciéndome que no me querían asustar, pero que se estaba dando a conocer que podía ser que Andrés estuviera muerto por un tiroteo", contó Rocío en una entrevista con Telefe.

Sobre el crimen que cometió su pareja, afirmó que "no estaba bien lo que Andrés estaba haciendo, porque no era su derecho ir a robar y querer sacarle la moto al policía. Lamentablemente le tocó enfrentarse con un policía" y sumó: “No lo quiero hacer santo porque está a la vista que él fue el primero en ir hacia la otra persona, pero no era la forma. Siento que me lo mataron como a un perro".

Respecto al accionar del sargento Lucas Mallea, Rocío relató que retrocede “a cada rato ese video y veo que el policía le quitó la vida directamente. Él no se merecía que lo maten de esta forma, porque ya con un solo disparo él podría estar pagándolo distinto. Quizás en un hospital o preso".

De acuerdo a la novia de Andrés Carbonel, el policía, quien ya fue liberado el martes luego de brindar su testimonio, “tiene que pagar. Siendo un policía, un hombre de la fuerza que lo capacitaron... no era la forma”, reflexionó.

Las despedidas al motochorro

Luego de que trascendieran algunos mensajes en redes sociales del entorno de Andrés Carbonel, en donde se lo despide con frases como “siempre te vamos a recordar por lo que fuiste, un re ladrón y una re persona”, Rocío se mostró crítica de los homenajes. 

"Algunos se sienten orgullosos porque Andrés es conocido. Muchos me dijeron de todo, me dijeron que era una vergüenza, diciendo que era lo peor. Muchas veces han matado a chicos conocidos y se dicen muchas boludeces como que 'te fuiste y volá alto, chorro'. Hoy la juventud está en lo que vimos el domingo", dijo. 

Además, la novia del motochorro sumó que “la gente que realmente lo conoce a Andrés sabe la persona buena que era, a pesar de este defecto que él tenía. El gran corazón que él tenía, lo mucho que amaba a su hija. En cada momento que estaba con ella la disfrutaba al máximo. Había algo que lo invadía tanto en su alma, en su corazón, que no le dejaba ver la claridad de la vida, que tenía alguien por quién luchar, que es mi hija".

Respecto al consumo problemático de sustancias, Rocío comentó que si bien "no era un chico súper drogadicto", su círculo cercano quería ayudarlo e intentaba "convencerlo de que aceptara internarse, para cambiar de vida".

La liberación del policía que mató a Andrés Carbonel por la espalda

El martes, el sargento Mallea fue indagado en el caso que es investigado por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de Moreno-General Rodríguez. Tras su declaración, el fiscal Gabriel López dispuso su libertad por considerar que habría exceso en la legítima defensa.

Mallea, quien espera que avancen los peritajes en la causa, está acusado de homicidio agravado por ser perpetrado por un miembro de la fuerza de seguridad abusando de su función y por el uso de arma de fuego, en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público, confirmaron fuentes judiciales.

El acusado reconoció haber disparado su arma reglamentaria para defenderse de un intento de robo y dijo que temió por su vida y la de su novia, ya que el fallecido le había apuntado con un arma. Además, Mallea declaró que no recordaba haberse identificado como policía y que no supo cuántos disparos realizó, pero sí que dejó de gatillar cuando el ladrón cayó al suelo.