Habló el ex socio de Schoklender
Alejandro Gotkin confesó ante el juez federal Norberto Oyarbide la "operatoria" con cheques para desviar fondos públicos del programa "Sueños Compartidos".
Alejandro Gotkin, contador y ex socio de los hermanos Schoklender, confesó ante el juez federal Norberto Oyarbide la "operatoria" con cheques para desviar fondos públicos del programa "Sueños Compartidos" y sostuvo que las empresas Meldorek y Antártica "eran instrumentos para hacer de caja en la Fundación Madres de Plaza de Mayo".
"Yo no era organizador de nada. Acataba órdenes, en todo caso, como presidente de Antártica y como presidente de Meldorek, ambas empresas eran instrumentos jurídicos para hacer de caja a la Fundación", señaló el contador en su declaración ante el juez este jueves..
Gotkin, que se encuentra detenido junto a los hermanos Sergio y Pablo Schoklender, confesó ante el juez la "operatoria" con cheques para desviar fondos públicos que ingresaban para el plan "Sueños Compartidos" para la construcción de viviendas, con el objetivo de "hacerse de dinero en efectivo".
"Muchísimas veces estaba en contra de las órdenes que se me impartían. Sobre todo en esta operatoria de hacer dinero de cheques. Yo sabía que estábamos cometiendo una falta. Pero lamentablemente la Fundación requería de servicios míos a través de Antártica, un poquito de Meldorek y otras financieras que estaban dando vueltas, para hacerse de dinero en efectivo por varios motivos", señaló Gotkin.
El socio de Schoklender dijo que "la operatoria era muy sencilla: se metían cheques, se depositaban en una cuenta -en este caso, de Antártica- y a las 48 horas se devolvía el dinero porque la Fundación no podía disponer del dinero de sus cuentas en efectivo. Para hacerlo requería que Sergio o en su defecto Pablo fueran al banco y lo retiraran por ventanilla".
"Sergio no estaba disponible para ir al banco; cuestiones de seguridad, llevaba un ritmo de vida alocado. El banco no otorgaba pagos en efectivo por tratarse de una cuenta nueva. Resultaba más operativo, más cómodo, recurrir a estos servicios de descuento de cheques para financiación", indicó.
Al respecto, aseguró que "Sergio Schoklender era quien impartía las órdenes o Pablo, en todo caso; eran los dos apoderados", mientas que él "no tenía cargo operativo", al tiempo que habló de empleados "no registrados", "indocumentados" y con "temas pendientes con la Justicia".
"La Fundación tenía casi seis mil empleados, muchos de los cuales me consta que no están registrados por infinidad de motivos; había gente que era indocumentada y tenía temas pendientes con la Justicia. Y muchísima gente no estaba bancarizada", apuntó.
El martes pasado, Oyarbide ordenó las detenciones de Sergio y Pablo Schoklender junto a Gotkin, acusados de ser partícipes de una asociación ilícita, cometer administración fraudulenta y defraudar al Estado.
"Yo no era organizador de nada. Acataba órdenes, en todo caso, como presidente de Antártica y como presidente de Meldorek, ambas empresas eran instrumentos jurídicos para hacer de caja a la Fundación", señaló el contador en su declaración ante el juez este jueves..
Gotkin, que se encuentra detenido junto a los hermanos Sergio y Pablo Schoklender, confesó ante el juez la "operatoria" con cheques para desviar fondos públicos que ingresaban para el plan "Sueños Compartidos" para la construcción de viviendas, con el objetivo de "hacerse de dinero en efectivo".
"Muchísimas veces estaba en contra de las órdenes que se me impartían. Sobre todo en esta operatoria de hacer dinero de cheques. Yo sabía que estábamos cometiendo una falta. Pero lamentablemente la Fundación requería de servicios míos a través de Antártica, un poquito de Meldorek y otras financieras que estaban dando vueltas, para hacerse de dinero en efectivo por varios motivos", señaló Gotkin.
El socio de Schoklender dijo que "la operatoria era muy sencilla: se metían cheques, se depositaban en una cuenta -en este caso, de Antártica- y a las 48 horas se devolvía el dinero porque la Fundación no podía disponer del dinero de sus cuentas en efectivo. Para hacerlo requería que Sergio o en su defecto Pablo fueran al banco y lo retiraran por ventanilla".
"Sergio no estaba disponible para ir al banco; cuestiones de seguridad, llevaba un ritmo de vida alocado. El banco no otorgaba pagos en efectivo por tratarse de una cuenta nueva. Resultaba más operativo, más cómodo, recurrir a estos servicios de descuento de cheques para financiación", indicó.
Al respecto, aseguró que "Sergio Schoklender era quien impartía las órdenes o Pablo, en todo caso; eran los dos apoderados", mientas que él "no tenía cargo operativo", al tiempo que habló de empleados "no registrados", "indocumentados" y con "temas pendientes con la Justicia".
"La Fundación tenía casi seis mil empleados, muchos de los cuales me consta que no están registrados por infinidad de motivos; había gente que era indocumentada y tenía temas pendientes con la Justicia. Y muchísima gente no estaba bancarizada", apuntó.
El martes pasado, Oyarbide ordenó las detenciones de Sergio y Pablo Schoklender junto a Gotkin, acusados de ser partícipes de una asociación ilícita, cometer administración fraudulenta y defraudar al Estado.