Gobernadores peronistas apuntan contra Cristina: "Su proyecto político está agotado"
Cuestionan a la ex presidenta, a la que responsabilizan por la derrota electoral del partido en varios distritos.
Los cañones de la mayoría de los gobernadores peronistas apuntan a Cristina Kirchner. Coinciden en que el proyecto político de la ex presidenta está terminado y que más allá de los resultados de las PASO, en el que varios perdieron, la "liga" es la alternativa de reorganización del peronismo.
El cordobés Juan Schiaretti, uno de los derrotados del domingo, aseguró que la elección confirmó que la ex presidenta "no tiene chances de volver a conducir el país". Como ya lo había planteado antes de la votación, insistió en que el proyecto político de Cristina Kirchner "está agotado".
Hace unas semanas había descrito que es el "modelo de conducción" kirchnerista el que ya no tenía espacio para resurgir aun cuando podía hacer "una buena elección" en provincia de Buenos Aires. "Eso no significa que ella va a dirigir el peronismo ni vaya a tener un bloque más grande en el Congreso; por el contrario, su fuerza perderá legisladores nacionales", graficó.
El salteño Juan Manuel Urtubey -quien, a la luz de las PASO, podría ser uno de los que dispute el liderazgo de la liga de gobernadores- también está convencido de que no hay más espacio para la ex mandataria, y entiende que los votantes quisieron dar vuelta la página.
El planteo generalizado es que Cristina Kirchner quedó "circunscripta" a Buenos Aires, lo que -según sus interpretaciones- tiene dos aristas. Por un lado, les permite a ellos seguir construyendo una alternativa como interlocutores de la Casa Rosada y, por el otro, determinaría un cambio de estrategia de Cambiemos, que no podría seguir polarizando en la próxima campaña presidencial.
Después de las PASO, Domingo Peppo, gobernador de Chaco, insistió en lo que le dijo a La Nación respecto de Cristina Kirchner: "Es una dirigente más". A su criterio, el PJ debe "mirar hacia delante" y "mirar al otro como un par". En referencia a la pérdida de poder del kirchnerismo en el partido, apuntó: "Nadie te saca porque sí, la gente es la que te saca".
El chaqueño al igual que su par de La Rioja, Sergio Casas, solían ser más moderados en sus definiciones respecto del kirchnerismo por su cercanía a Jorge Capitanich (intendente de Resistencia) y al diputado nacional Luis Beder Herrera, respectivamente.
En esta elección, los dirigentes riojanos aparecieron más concentrados en apoyar a Carlos Menem que en el destino de los kirchneristas. "Una vez que Cristina perdió poder, el vínculo se diluyó. Tomaron distancia, ni nombran al kirchnerismo", confió a este diario un dirigente provincial.
En los intercambios de llamadas de los últimos días, según pudo saber La Nación, los gobernadores consensuaron que uno de los ejes del discurso es que "se nacionalizó" la campaña, que Mauricio Macri eligió "levantar" la figura de la ex presidenta y presentarla como un obstáculo para las reformas a realizar. En esa agenda, precisamente, hay varios aspectos que involucran directamente a las provincias (cambios impositivos, responsabilidad fiscal y coparticipación).
Esa estrategia es también una forma de encarar el camino hacia octubre en sus propios distritos, sobre todo para quienes perdieron. "Ahora que los cordobeses ya saben que Cristina Fernández no tiene ninguna chance de volver a gobernar el país, espero que en la próxima campaña se puedan debatir las propuestas y que la gente conozca a los candidatos de cada espacio político", argumentó, por ejemplo, Schiaretti.
Aunque más cauto en la confrontación, el sanjuanino Sergio Uñac -quien se reunió con el senador Miguel Ángel Pichetto para coordinar "la defensa de los intereses de las provincias"- también descarta que la ex mandataria tenga chances en 2019. "Creo que este ha sido un escenario que el gobierno nacional fabricó", dijeron en su entorno.
Una posición similar es la de Gustavo Bordet, gobernador de Entre Ríos derrotado en las PASO. A su entender, "en el peronismo se cumplen ciclos". Antes de las PASO también se encontró con Pichetto.
Fuentes cercanas a los distintos gobernadores confirmaron a este diario que si el escrutinio definitivo en Buenos Aires dejara a Cristina algo por encima de Cambiemos, su posición no cambiará. Ratificaron que la performance estuvo por debajo de lo que ella misma esperaba y no la deja en condiciones de "dar órdenes a nadie".
(Fuente La Nación)