Genitales a la carta
Seguramente tendrían que pagarte bastante guita para probar estos platos. Pero a lo mejor te animás.
Hay gente que, aunque no lo creas, gastaría cientos de dólares en delicias tales como un pene de yak o gónadas de oveja bien cocinadas. Esto es lo que hizo que el Guolizhuang Restaurant sea tan popular en Beijing, China.
De acuerdo a un dicho conocido: "Los chinos comen cualquier cosa que tenga cuatro patas, excepto mesas. Y todo lo que vuela, excepto aviones". La comida de este restaurante es prueba de ello. Este extravagante establecimiento abrió en 2006, ofreciendo todo tipo de platos, siendo el principal ingrediente los genitales de animales.
Muchos chinos creen que los penes de animales incrementan la potencia masculina y que también son maravillosos para la piel de la mujer, así que se corrió la voz rápidamente sobre la comida que ofrece este lugar en la calle Dongsishitiao, y los dueños expandieron su negocio: ahora hay varias franquicias en toda la ciudad de Beijing y en el barrio Chinatown de Atlanta, EE.UU.
No se permite que los adolescentes menores de 15 años coman estos platos debido a que las hormonas contenidas en ellos pueden interferir con el crecimiento. El plato más caro es el pene de tigre, que cuesta 1.500 dólares y tiene que reservarse con meses de anticipación.