Furia "China"

La revista Caras tiene como protagonista en su tapa de esta semana a "la China" Suárez, que ayer, furiosa por la nota que publicaron, arremetió contra el medio a través de la red social, Twitter, de la que aseguró está toda fuera de contexto.

A pesar de su intento de mantener un bajo perfil y no hablar de sus amores ni su vida privada, Eugenia Suárez (20) no puede evitar quedar en el foco. Su belleza fresca e inapelable y su exitoso trabajo como actriz bastarían para ubicarla en el centro, pero es su corazón el que no le da respiro. Ya sea por su anterior relación con Ignacio Viale (32), o por el revuelo mediático que sufrió por su romance con Nicolás Cabré (32) en plena separación de Eugenia Tobal (36), "la China" disfruta de uno de sus mejores momentos profesionales desde su comienzo en "Rincón de Luz" o su paso por "TeenAngels". Y a pesar del escándalo, que en un primer momento la agobió, ahora declara sin inhibiciones estar completamente enamorada, con la sensación de calma y libertad que le dio el haber confesado su amor.

Fueron meses difíciles. A principio de 2012, se terminaba una relación de más de dos años con el nieto de Mirtha Legrand y uno de sus primeros amores, "Nacho" Viale. Y si bien Eugenia aclaró que las relaciones no se superpusieron, conoció a Nicolás Cabré en el set de "Los Unicos" y le volvió a dar una oportunidad al amor. "Sigo creyendo y apuesto al amor, tengo sólo 20 años ¿cómo no voy a creer?", había confesado la joven y bellísima actriz. En simultáneo a la ruptura de "la China" con Viale, Cabré estaba en plena separación de Eugenia Tobal, tras un fugaz matrimonio de siete meses, en el que sufrieron la terrible noticia de la pérdida de un embarazo.

Entre confesiones y desmentidas e idas y vueltas sobre su romance, la ex TeenAngel había asegurado que le gustaban los hombres mayores que ella y de carácter fuerte, declaración que inevitablemente se asoció con el perfil del protagonista de "Son Amores", "Botineras" y "Los Unicos". Para el 24 de abril, ya no quedaban dudas, "la China" participó del show de Jey Mammon donde subió al escenario para confersarle al personaje Estelita que los rumores eran verdaderos y, a pesar del escándalo que caería sobre lasespaldas, admitió que era más que un romance, es decir, estaban enamorados.

—¿Le molesta hablar de todo lo que pasó entre Nicolás Cabré, Eugenia Tobal y usted? —No, no me jode. Pero ya no me dan ganas, no tengo nada más que decir.

—¿Cómo maneja ser el centro de los comentarios? ¿Fantasea con dejar todo, alejarse? —No, jamás. Lo mío es otra cosa.

Si fuese mediática y me harto de eso, ahí sí me tendría que retirar. Pero me gusta actuar, hacer otra cosa, es mi vida. Obviamente que siempre van a hablar porque, lamentablemente, estás expuesta. Entiendo que es así.

A veces no está bueno que la gente juzgue y cree que sabe cómo son las cosas. Como yo no hablo y no cuento nada sobre mi vida, terminan diciendo cualquier cosa.

—Un ejemplo de esto es lo que hizo Cabré que salió a aclarar lo que había pasado con Tobal en un programa de televisión.

—Yo de Eugenia prefiero no hablar, porque, la verdad, no me interesa.

— ¿No siente ni un poco de lástima por lo que le pasó? —Jamás le tendría lástima, además, creo que para ella no debe haber nada más feo que le tengan lástima. Eugenia hace su vida y ni la conozco, grabé sólo un par de veces junto a ella, no compartí casi ninguna escena. Acá se trata de separaciones, y cada cual sabe lo que pasó.

— ¿Y usted quedó en el medio? —No, yo no estuve en el medio, porque estuvo bien claro cuándo fueron las separaciones. Pero, bueno, una no sale por ahí a decir "me separé".

—¿Fue una liberación mostrarse con Nicolás? —Y ahora sí, obviamente. Igual estaba hace un mes, no se superpuso con nada.

— ¿Pero no creía que iba a armar revuelo cuando blanqueara su relación? —Y sí, pero por lo menos de ahí en adelante íbamos a poder ir a comprar una Coca-Cola juntos y tranquilos, o irme de viaje, como hicimos.

—Cuando habla del tema le cambia automáticamente la cara, como si la entristeciera.
— La verdad es que últimamente estuve muy expuesta, y no estoy acostumbrada a eso. Yo por lo menos no lo elijo, a mí me gusta actuar, no me gusta sentarme a contarle a la gente de mi vida. Sé lo que quiero hacer y trato de no pifiar. Ya está, estoy bien, estoy de novia y todo se calmó un poco, que es lo que yo quería.

—¿Le molesta que hablen, que digan que él es un mujeriego y que la va a dejar? —¡Pero no!, cuando una está de novia apuesta por una persona, y confía. Yo también me puedo enamorar de otra persona si hago una tira (risas). No me parece nada tan grave y no me interesa el pasado de nadie cuando me pongo de novia con alguien. Yo también tuve mis novios, quizá yo soy más chica, pero no juzgo. Yo lo quiero a él, y lo elijo tal cual es. Sé que la gente no lo conoce y no sabe, tienen una imagen de él que no es la real, porque no le gusta la prensa, no quiere estar expuesto.

— ¿Cree que es mejor salir a decir lo que pasa y aclarar las versiones o prefiere decir "no doy notas porque es mi vida privada"? — Creo que una debe manejarse como quiera, cada uno elige. Nadie te puede romper las p... con lo que vos decidís hacer. Yo elijo no calentarme cuando en alguna revista sale una foto mía. Pero, también, tengo que admitir que sí, es bastante incómodo ir a la panadería y que todos te digan: "¡Che, qué quilombo armaste, eh!", pero está todo bien. Sé que eso pasa, y no me molesta. A mí no me gusta, no se sabe nada y cuanto más bajo perfil pueda tener, mejor. Soy muy vergonzosa, ni me gustaba actuar de protagónico en los actos del colegio. Es un tema de personalidad, nunca me gustó estar en el centro de la escena.

— Pero ahora está en el centro de las miradas...
— Sí, pero ya va a pasar, es pasajero.