Funerales pirotécnicos
Esparcir las cenizas de un ser querido en el agua aparentemente ya es cosa del pasado.
Al menos, eso es lo que pasa con las mascotas de Sydney, Australia. "Ashes to Ashes" ("Cenizas a las cenizas") es un servicio a cargo de un experto artista circense y pirotécnico llamado Craig Hull que permite a la gente mandar las cenizas de sus mascotas al aire en una especie de festival pirotécnico, para luego caer en las aguas del puerto de Sydney como lugar de descanso final.
A Hull se le ocurrió la idea de "Ashes to Ashes" cuando sus dos queridos perros murieron, hace tres años. Ellos eran Zeus y Gyprock, quienes dejaron un vacío tan grande en la vida de este artista que pensó que solo podía paliarse con un gran gesto de amor. Habiendo ya esparcido las cenizas de un querido amigo suyo durante una rutina aérea en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos (no dijo en cuáles Juegos), quiso darle a sus perros algo más espectacular. "Pensé en conseguir un trabajo como pirotécnico y enviarlos junto con los fuegos artificiales. Así que lo hice", dice Hull. El evento tuvo lugar finalmente en 2010, durante los festejos de Año Nuevo en Sydney.
"Poder esparcir las cenizas de alguien de esta forma, sobre un área enorme en el aire fue increíble. Poder mirar al cielo cuando enviás a tus seres queridos es un sentimiento muy emocionante", dice Hull.