Femicidio en Loma Hermosa: fue a la panadería donde trabajaba su ex, la mató de dos tiros y se suicidó
Verónica Esther Villalba (52) y el agresor, Hugo Antonio Marchi, tuvieron una relación durante casi 10 años, pero se habían separado semanas atrás.
Un hombre ingresó a la panadería en la que trabajaba su expareja, la asesinó de dos tiros y luego se suicidó. El femicidio ocurrió cerca de las 6.20 de la mañana en la localidad de Loma Hermosa, partido de Tres de Febrero.
Verónica Esther Villalba (52) se encontraba en su lugar de trabajo, una panadería ubicada en la esquina de Morganti y Florida, llamada "Martín Fierro". Cerca de las 6:20 de la mañana Hugo Antonio Marchi (65), su ex pareja, llegó al negocio manejando un vehículo Ford que estaba a nombre de ella. Estacionó en la puerta e ingresó al local, que todavía no había abierto.
Ambos habían tenido una relación de pareja de casi 10 años, que se terminó apenas hace poco más de un mes. Según testimonios de amigos, Marchi era un hombre celoso, que ejercía violencia psicológica sobre la mujer. Le recriminaba con gritos e insultos cómo iba vestida a trabajar, si tenía maquillaje o no.
A esa hora, en el local estaba solamente Verónica y un compañero de trabajo de nombre Carlos. Allí comenzó a gritarle, con una pistola en la mano derecha. "Vos no te metas", le dijo Marchi al joven.
Le disparó dos veces a su ex pareja. La primera en la cabeza y luego en el tórax. Luego se suicidó de un tiro en la sien.
Cristian logró salir corriendo para pedir ayuda. Una vecina, que escuchó las detonaciones, logró dar alerta a través de una de las paradas de colectivos con botón antipánico que se encontraban a pocos metros de la panadería. Pero cuando llegó la policía ambos estaban muertos.
Verónica era madre de una chica de 24 años. La joven llegó a la panadería y luego se fue acompañada por la policía.
"Escuché el grito de su compañero, miré desde mi terraza y vine rápido. Pero cuando llegó la ambulancia vimos que ya estaba muerta", contó Silvia, una amiga de Verónica y clienta de la panadería en diálogo con TN.
"Ella me dijo que se había separado. 'Vamos, fuerza' le decía cuando me contó. Después me enteré que él la insultaba cuando se maquillaba. Las chicas que pasen por esto que hablen, que no haya más Veros", relató Silvia.
Según los testigos, el hombre no ejerció nunca violencia física pero sí mucha violencia psicológica. "No existen denuncias previas en sede penal ni en el fuero de familia", dijo a Télam una fuente judicial. La causa está a cargo de la UFI N6 de San Martín, a cargo de la Dra. Marcela Costa.
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