Federico Cash, el hombre que murió en busca de su hija desaparecida
Como un detective privado, el padre de María pasó los últimos cuatro años de su vida dedicándose a recibir llamadas de personas que creyeron haberla visto.
Con el objetivo de encontrar a su hija y acelerar los tiempos judiciales, Federico Cash, el padre de María -la joven diseñadora que viajó al norte y fue vista por última vez en julio de 2011- encaró una búsqueda sin precedentes.
Federico, casi como un detective privado, pasó los casi últimos cuatro años de su vida dedicándose a recibir llamadas de personas que creyeron haber visto a su hija en algún lugar, aunque sin éxito.
Personalmente se encargaba de procesar los datos, con la ayuda de su esposa María del Carmen y sus dos hijos Máximo y Santiago para luego enviárselos a Gendarmería, sin perder la esperanza de que al menos uno de esos llamados le permitiera dar con el paradero de María.