Farro vs Rincón: Mujeres "fatal"
La pelea entre Mónica Farro y Andrea Rincón fue un compendio de lugares comunes y poco felices en boca de dos señoritas desquiciadas.
Por Adrián Pallares
@adrianpalla
Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich
"Hay mujeres veneno; mujeres imán... mujeres consuelo, mujeres puñal. Hay mujeres de fuego, hay mujeres de hielo, mujeres fatal"; dice una canción. La tele mostró en las últimas horas un nuevo caso de chicas nerviosas, pulposas, ansiosas y cargosas.
Corriendo un poquito más el límite sin límite de todos los días, cual dos conventilleras en el medio de la calle, Andrea Rincón y Mónica Farro no se cruzaron para compartir poesías de Alfonsina Storni aunque bien estaban listas para arrojarse a los mares de la insensatez.
"Cornuda"; "Drogadicta"; "Yo tengo conch.."; una serie de no sutilezas de dos chicas malas que tuvieron la poca suerte de cruzarse. Luego de insultarse con Daniel Ambrosino en el medio -el periodista ladeaba la cabeza como si mirara un partido de tenis- la morocha se fue llorando presa de un ataque, amenazando a su contrincante con un juicio, aunque tenía más ganas de pegarle una trompada.
Impulsivas, dueñas de cuerpos impresionantes, dos minas puteándose así "te la baja". No quedan ni seductoras, no calientan a nadie; mucho menos parecen interesantes. Alguno se hará el fetiche de imaginarlas desnudas en el barro o reconciliándose en privado, pero para la tele quedaron como dos grasas.
Si fueran dos chicas que recién empiezan en la casa de "Gran Hermano", vaya y pase. Pero Farro es una gran vedette y Rincón ha demostrado que puede hacer algo mejor. No les hace falta.
@adrianpalla
Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich
"Hay mujeres veneno; mujeres imán... mujeres consuelo, mujeres puñal. Hay mujeres de fuego, hay mujeres de hielo, mujeres fatal"; dice una canción. La tele mostró en las últimas horas un nuevo caso de chicas nerviosas, pulposas, ansiosas y cargosas.
Corriendo un poquito más el límite sin límite de todos los días, cual dos conventilleras en el medio de la calle, Andrea Rincón y Mónica Farro no se cruzaron para compartir poesías de Alfonsina Storni aunque bien estaban listas para arrojarse a los mares de la insensatez.
"Cornuda"; "Drogadicta"; "Yo tengo conch.."; una serie de no sutilezas de dos chicas malas que tuvieron la poca suerte de cruzarse. Luego de insultarse con Daniel Ambrosino en el medio -el periodista ladeaba la cabeza como si mirara un partido de tenis- la morocha se fue llorando presa de un ataque, amenazando a su contrincante con un juicio, aunque tenía más ganas de pegarle una trompada.
Impulsivas, dueñas de cuerpos impresionantes, dos minas puteándose así "te la baja". No quedan ni seductoras, no calientan a nadie; mucho menos parecen interesantes. Alguno se hará el fetiche de imaginarlas desnudas en el barro o reconciliándose en privado, pero para la tele quedaron como dos grasas.
Si fueran dos chicas que recién empiezan en la casa de "Gran Hermano", vaya y pase. Pero Farro es una gran vedette y Rincón ha demostrado que puede hacer algo mejor. No les hace falta.