Fariña besa chicas en la noche y le ofrece insólita vivienda a Karina Jelienk
De día negocia con su ex para que se vaya del piso de Libertador antes que la justicia los saque de una patada; por las noches sigue de gira y anda a los besos en los boliches.
Leo Fariña sigue de ronda nocturna mientras la Justicia dirime el divorcio con su ex Karina Jelinek y la causa en la que se investiga el lavado de dinero que lo involucra.
Ahora aparecen fotos del boliche Aqua en las que se lo ve aprovechando sus cinco tristes minutos de fama para apretarse cuanta señorita se le pasa por delante. El muchacho del rodete no pierde el tiempo ni las mañanas y anda a los besos con chicas dispuestas a ir a contarlo en televisión la semana que viene.
Fariña sigue en disputa con Jelinek por el departamento de Libertador y San Martín de Tours que ambos continúan "okupando" mientras esperan la orden de desalojo.
El último ofrecimiento que él le hizo para que se vaya es darle un nuevo semi piso en Barrio Parque, con privilegiado balcón del que se puede ver la piscina de la mansión de la mismísima Susana Giménez. Quien le ofreció a Fariña ese departamento, para que a su vez se lo de a Jelinek, es nada más ni nada menos que de Jacobo Winograd.