Ezequiel Jaitt, el otro hermano de Natacha, asegura: "Voy a creer en la Justicia"
Estremecido por la muerte de la conductora remarcó que necesita cuidar a su familia y contener a sus sobrinos.
Se enteró de la muerte de su hermana, Natacha Jaitt, el sábado a la madrugada. A las 5 de la mañana le llegó la trágica noticia y de inmediato viajó a Buenos Aires. Y, una vez en la ciudad, se pasó todo el día en la morgue de San Fernando. Se quedó hasta pasadas las 22, cuando finalmente, tras las pericias, fue retirado de allí el cuerpo de la mediática.
Ezequiel es el integrante menos conocido de la familia Jaitt. Tiene 40 años y vive en Pueblo Uranga, una localidad ubicada a 30 kilómetros de Rosario. Trabaja en el ámbito político y no quiere saber nada con el mundo de la farándula.
"Estoy tratando de estar firme por mi familia", dice en diálogo con Clarín. "Me enteré de la detención (por la de Raúl de Jesús Velaztiqui Duarte, el productor que llevó a Natacha al lugar en el que murió), ojalá se sepa la verdad", agrega.
Se lo nota triste, decaído. Y no es para menos: su hermana falleció de manera extraña y repentina en lo que en un principio iba a ser una reunión laboral y terminó siendo una noche fatídica en la que no faltaron las drogas, el sexo y el alcohol.
"Yo voy a creer en la Justicia y esperar para saber la verdad y que tengamos... (piensa) más que nada que Nacha descanse en paz", sostiene. Y remarca: "Quiero saber la verdad y que mi hermana descanse en paz, y que haya justicia si hay gente comprometida, nada más".
Sin ánimos de dar más declaraciones, y anticipando que no atenderá a ningún otro medio porque "Ulises es el que se encarga de la prensa y él sabe lo que tiene que hacer y lo que tiene que decir", cuenta cuál es su rol hoy dentro del círculo íntimo de los Jaitt.
"Yo tengo que cuidar a mi familia y darle contención a mis sobrinos. Estamos muy dolidos", cierra, notablemente conmovido.