¿Existieron astronautas en la antigüedad?
Erich von Däniken es uno de los principales vendedores de mitos sobre civilizaciones extraterrestres que visitaron la Tierra.
El partidario más famoso de esta idea es el escritor suizo Erich von Däniken (ver foto), nacido en 1935, autor de varios libros populares sobre la materia y condenado por falsificación de documentos para obtener créditos, entre otras cosas. "¿Carrozas de los dioses? Misterios del pasado sin resolver", por ejemplo, es un ataque que subestima los conocimientos y habilidades de los pueblos humanos de la antigüedad.
Von Däniken afirma que los mitos, artes y organizaciones sociales de las culturas antiguas le pertenecen a astronautas que supuestamente se encargaron de traerlos a nuestro planeta. En otras palabras, casi es un insulto al esfuerzo de varias culturas de la Tierra por entender el universo y desarrollar artes y herramientas y construir monumentos excepcionales. Parece que si no hubiéramos obtenido la "ayudita" de los extraterrestres no podríamos haber inventado ni el martillo. Von Däniken cuestiona la capacidad de los seres humanos de la antigüedad para formar una cultura y una civilización. Nos dice que los hombres prehistóricos no desarrollaron sus propias artes y tecnologías, sino que las aprendieron de los visitantes del espacio exterior.
Aparece el fraude, moneda corriente en von Däniken
Algunas cosas que afirmó von Däniken directamente son producto del fraude. Por ejemplo, reprodujo fotografías de objetos de arcilla que, según él, habían sido encontrados en una excavación arqueológica. Los objetos representan platos voladores y se dijo que lo hallado data de los tiempos bíblicos. Sin embargo, los investigadores de Nova, un programa de televisión de divulgación científica, encontraron al ceramista que construyó los jarros supuestamente antiguos. Entonces confrontaron a von Däniken exhibiendo los objetos fraudulentos delante de él. Su respuesta fue que el engaño estaba justificado porque algunos solo creían si veían pruebas. ¡No debe haber respuesta más ingenua! Claro, en todo el mundo los investigadores quieren pruebas, sobre todo de afirmaciones extraordinarias.
¿Y las pruebas dónde están?
La mayoría de las "evidencias" que presenta von Däniken para sostener sus hipótesis tienen la forma de argumentos falaces, pero la idea sobre la que basa sus afirmaciones parece provenir de los cuentos del escritor de terror y ciencia-ficción H.P. Lovecraft, por ejemplo, "El mito de Cthulhu". La "información" de von Däniken consiste principalmente en sitios arqueológicos y mitos antiguos. Comienza asumiendo la existencia de astronautas antiguos y de ahí en adelante fuerza todo dato para que calce con su hipótesis central. Por ejemplo, en Nazca, Perú, explica los enormes y famosos dibujos de animales diciendo que se trata de un antiguo "aeropuerto alienígena". En realidad, uno pensaría que una civilización extraterrestre construiría pistas más modernas y no distraería a sus pilotos con dibujos de monos y arañas.
Pero von Däniken no considera el probable hecho de que esas figuras formaran parte de la religión o ciencia de los habitantes de la región. Para decirlo en otras palabras, von Däniken parece decir: o aceptamos que los datos pueden explicarse asumiendo que estos idiotas hicieron tales construcciones por sí mismos, o aceptamos la noción -más factible- de que recibieron ayuda de gente extremadamente avanzada que debe haber venido de otros planetas donde se habían inventado dispositivos de antigravedad. Lo raro es que los "avanzados extraterrestres" no hayan influido en otros campos, por ejemplo en la salud. Los nativos de los pueblos indígenas que recibieron la "ayuda" de los supuestos alienígenas morían como moscas frente a cualquier infección. ¿Por qué no les dieron la fórmula del antienvejecimiento? Nadie lo explica: les ayudaron a dibujar animales gigantes y a hacer jarros pero no les dieron ni una receta para vivir más y mejor.
En lugar de aceptar que las pruebas de su hipótesis brillan por su ausencia, von Däniken insiste en justificar lo injustificable. Debido a su best-seller "Recuerdos del futuro" -que también fue llevado al cine- la revista Annals of Improbable Research, le otorgó en 1991 el premio IgNobel, parodia del Premio Nobel que se entrega a investigaciones absurdas, que hacen reír antes de pensar.
Lo que hace von Däniken puede llamarse "pseudohistoria" o "pseudoarqueología" y, por supuesto, ha recibido muchas críticas. Ronald Story se destaca como uno de sus principales críticos. La mayoría de las objeciones a las teorías de von Däniken hacen referencia a su noción de que los pueblos antiguos eran incompetentes y salvajes que no podían aprender por sí mismos. No podían hacer nada solos, tenían que ser "guiados". Esto no es verdad. Las pirámides de Egipto, monumentales obras si las hay, han sido construidas por seres humanos. Ya se ha explicado debidamente cómo fueron construidas y hoy día los arqueólogos aceptan la explicación.
Es cierto que existen construcciones antiguas que todavía no sabemos cómo se hicieron. Pero no hay que tapar un hueco con basura pseudocientífica para sacarnos la incertidumbre. Nos quedamos asombrados cuando vemos las estatuas de la Isla de Pascua, pero ello no quiere decir que quienes las construyeron hayan recibido ayuda extraterrestre.
Por otra parte, si nuestros antepasados hubieran sido visitados y aconsejados por alienígenas, hubieran tomado el debido registro de semejante acontecimiento, cosa que hoy no se ve. Quiere decir que von Däniken no solo subestima la tecnología de nuestros antepasados sino también su capacidad de memorizar y registrar eventos.
En definitiva, lo que hace von Däniken es lo contrario de lo que haría cualquier investigador serio: comete fraude, rechaza las evidencias que contradicen sus hipótesis y sigue fantaseando con supuestas culturas extraterrestres.