Excura pedófilo liberado
Fue el primer sacerdote en ser condenado en el país. Ya tiene salidas temporales.
El excura Mario Napoleón Sasso, de 55 años, quien fue el primer sacerdote condenado en el país por abusar de menores cuando era párraco de la capilla de la localidad bonaerense de La Lonja, partido de Pilar, fue beneficiado con salidas transitorias.
El fallo le permite al exsacerdote salir de la cárcel transitoriamente; fue dictado la semana pasada por la Sala III de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro y lleva la firma de los jueces Celia Margarita Vázquez y Gustavo Herbel.
En tanto, el Tribunal Oral en lo Criminal número 1 de San Isidro, que en 2007 condenó a Sasso a 17 años de prisión por abusar en la capilla a cinco niñas de entre 7 y 14 años, planteó su oposición al beneficio, pero por orden de sus superiores de la Cámara, las salidas comenzaron a efectivizarse desde la semana pasada.
En el juicio oral, se demostró que entre 2002 y 2003 Napoleón Sasso, único sacerdote de la capilla San Miguel de La Lonja, donde funcionaba un comedor, les ofrecía a las niñas caramelos y las invitaba a ver televisión a su habitación, donde las desvestía, manoseaba y se masturbaba delante de ellas.
Había sido condenado por "abuso sexual doblemente calificado en razón del sometimiento sexual ultrajante para las víctimas y por su condición de ministro de un culto religioso".
El exsacerdote, ya tenía antecedentes de pedofilia en la diócesis de San Juan, (provincia de donde es oriundo), y por eso las autoridades eclesiásticas lo habían enviado a hacer un tratamiento entre 1996 y 1998 en la Domus Mariae de Tortuguitas, una institución donde son albergados sacerdotes con problemas de conducta.
El fallo le permite al exsacerdote salir de la cárcel transitoriamente; fue dictado la semana pasada por la Sala III de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro y lleva la firma de los jueces Celia Margarita Vázquez y Gustavo Herbel.
En tanto, el Tribunal Oral en lo Criminal número 1 de San Isidro, que en 2007 condenó a Sasso a 17 años de prisión por abusar en la capilla a cinco niñas de entre 7 y 14 años, planteó su oposición al beneficio, pero por orden de sus superiores de la Cámara, las salidas comenzaron a efectivizarse desde la semana pasada.
En el juicio oral, se demostró que entre 2002 y 2003 Napoleón Sasso, único sacerdote de la capilla San Miguel de La Lonja, donde funcionaba un comedor, les ofrecía a las niñas caramelos y las invitaba a ver televisión a su habitación, donde las desvestía, manoseaba y se masturbaba delante de ellas.
Había sido condenado por "abuso sexual doblemente calificado en razón del sometimiento sexual ultrajante para las víctimas y por su condición de ministro de un culto religioso".
El exsacerdote, ya tenía antecedentes de pedofilia en la diócesis de San Juan, (provincia de donde es oriundo), y por eso las autoridades eclesiásticas lo habían enviado a hacer un tratamiento entre 1996 y 1998 en la Domus Mariae de Tortuguitas, una institución donde son albergados sacerdotes con problemas de conducta.