Estos chicos no nacieron malos, sólo son monstruos
Un brutal ataque ocurrió el 31 de octubre pasado en el horario de salida de la Escuela Media Nº 6 Juan Domingo Perón ubicada en las calles 101 y 8, a metros del Cruce Varela.
La víctima fue abordada por dos de sus compañeros, tres menores, de 13, 14 y 15 años, con quienes habría tenido un problema dentro del colegio. Al momento del ataque, uno de los agresores sacó un objeto cortante (tal vez un vidrio) y lo cortó a la altura del cuello. Tras herirlo, entre los tres se encargaron de arrojarlo en un contenedor de basura. El chico, aún herido, pudo gritar y pedir auxilio. Los ruidos alertaron a un vecino que pasaba caminando por la cuadra. El hombre lo asistió y dio aviso a la Policía. El chico herido, fue trasladado al Hospital Evita Pueblo de Berazategui, donde ingresó con un traumatismo de cráneo y de uno de sus ojos por los golpes recibidos y con un corte a la altura del cuello, que fue suturado con ocho puntos.
Los tres agresores fueron identificados, y restituidos a sus padres. Permanecen en sus domicilios con una medida de seguridad dispuesta por el juez Ramos, por tratarse de menores de edad inimputables. Hasta que no se les hagan las pericias correspondientes, tienen prohibido salir de la casa. Ni siquiera para ir al colegio. También se les prohibió el contacto con la víctima y su familia.
En los próximos días, se van a tomar declaraciones testimoniales en el colegio para tratar de reconstruir lo que pasó. Empezarán con los docentes, luego los preceptores y alumnos, y a la espera de poder escuchar la declaración de la víctima. Hay que esperar a que lo den de alta y luego, a que esté en condiciones emocionales de hablar.
Se viralizó el estremecedor audio de uno de los agresores, donde se lamenta que la víctima aún siga con vida. La nota de voz dura 40 segundos y es tan escalofriante que uno lo primero que piensa es: “¿De qué familia vienen estos pequeños monstruos?”.
“Esto es gravísimo. Si está en urgencias, cagamos. Lo que vamos a tener que hacer es lavarnos las manos entre los tres (…) No puede saber nadie que nosotros estuvimos o fuimos. ¿Cómo mierda sigue vivo si me encargué de cortarle la yugular?”, dice uno de los supuestos agresores. También se lo escucha allí, pedir que le digan a otro amigo en común que los encubra “todo lo mayor posible”, y señala que entre todos tienen que defenderlo “hasta la muerte”. Fuentes judiciales indicaron que el audio no fue extraído de ningún teléfono y que se analizará para cotejarlo con otras pruebas. “Lo vamos a tener en consideración, pero como es un audio viralizado, no es un elemento 100% convincente”.
No es una prueba concluyente, pero sí demuestra que los agresores son jóvenes muy peligrosos, tanto que atacaron a su compañero con la intención de matarlo y no lo lograron por poco.
Semejantes conductas, no tienen otro origen que la casa y la familia. La gran causa de los problemas juveniles tienen su centro en familias disfuncionales y ensambladas de a ratos o por temporadas. Hoy, ya que los padres no controlan a los hijos y mucho menos les importa lo que hagan, sin dudas, la Justicia deberá brindarles un hogar de abrigo y un tratamiento que intente desentrañar que pasa por las cabezas de estos pequeños tan malos. SON MONSTRUOS ASESINOS. Es urgente la intervención del Estado, y ante la falta o ausencia de la familia, los menores deben ser rescatados y puestos a resguardo.
Ante estas situaciones, empiezo a plantearme, si Bukele no tendrá razón en encerrar a todo aquel que no respete la paz y el orden.
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