Especial para celíacos: qué comer y qué no en estas fiestas de fin de año

La enfermedad celíaca es una trastorno autoinmune que se caracteriza por una inflamación crónica de la parte próxima del intestino delgado, causada por la exposición a la gigliadina, una proteína vegetal de algunos cereales en la dieta. La gliadina es uno de los componentes del gluten (proteína presente en el trigo, la cebada, el centeno, el triticale, el kamut, la espelta y posiblemente la avena.

Como norma general, deben eliminarse de la dieta todos los productos a granel, los elaborados artesanalmente y los que no estén etiquetados, donde no se pueda comprobar el listado de ingredientes.

Al realizar las compras en panaderías o supermercados, hay que tener especial precaución con las harinas de maíz, arroz. Pueden estar contaminadas si su molienda se ha realizado en molinos que también muelen otros cereales como trigo o avena.

Es importante realizar una consulta sobre la forma de elaboración e ingredientes en cada plato, antes de consumirlos.
 

Asimismo, evitar freir alimentos sin gluten en aceites donde previamente se hayan frito productos con gluten.

 

En aquellas casas en las que hay un celíaco, se recomienda eliminar las harinas de trigo y el pan rallado normal y utilizar en su lugar harinas y pan rallado sin gluten o copos de puré de patata para rebozar, albardar, empanar o espesar salsas.  

De esta forma, muchos de los alimentos que se preparen los puede tomar toda la familia, incluido el celíaco.

Para tener en cuenta
Esta enfermedad daña el revestimiento del intestino delgado e impide la absorción de partes de los alimentos que son importantes para permanecer saludables. El daño se debe a una reacción por ingerir gluten, el cual se encuentra en el trigo, la cebada, el centeno y avena.

Profesionales consultados: Máximo Ravenna (MN 41.106) y Liliana Grimberg, Nutricionista del CTMR (MAT  978).