Escuchas caso Nisman: citarán a otro ex director de la SIDE

La declaración de Antonio Stiuso conduce la causa por la muerte de Alberto Nisman hacia otro ex jefe de la Secretaría de Inteligencia: Alberto Massino, a quien la fiscalía citará a declarar como testigo en los próximos días.

Así lo informó fuentes del Ministerio Público. En su declaración del martes pasado, Stiuso afirmó que muchos de los teléfonos de la flota a su nombre los usaban, en realidad, otros agentes (algo que ya había deslizado su abogado). Uno de ellos era el ex director general de Análisis, Alberto Massino, un hombre cercano a Stiuso que tenía a su cargo los archivos de inteligencia, también desplazado en los últimos tiempos. Stiuso dijo que algunas de las llamadas que se detectaron con Nisman las horas previas a su muerte habían sido hechas a un teléfono que, en realidad, utilizaba Massino.

Para ratificar este testimonio, Stiuso le dijo a Fein que podía chequearlo con las autoridades de la SI, que están al tanto de quién usaba cada línea.

No obstante, Stiuso admitió que al teléfono de él también llegaron llamadas de Nisman poco antes de su muerte. Según informó La Nación una fuente cercana a Stiuso, él declaró que no las había escuchado porque su teléfono tenía "el volumen bajo".

De acuerdo con los registros que son parte de la causa, la última llamada de Nisman a un teléfono de la flota de Stiuso fue el sábado 17 de enero a las 18.25 (el día previo a que Nisman apareciera muerto), informó otra fuente con acceso al expediente.

Es decir que el fiscal llamó a ese teléfono entre la primera y la segunda visita de Diego Lagomarsino. En la primera, Nisman le pidió el arma. En la segunda, Lagomarsino le llevó su pistola y le explicó cómo usarla. Según la declaración del portero de Le Parc que estaba ese sábado en la guardia que controla los ingresos, Lagomarsino llegó al edificio a las 19.50. "Que pase directamente y no lo retengas", declaró el portero que le dijo Nisman. Agregó que creía recordar que se había ido 20 minutos después. Lagomarsino es, por lo que se conoce hasta hoy, la última persona que lo vio con vida.

Stiuso declaró ante la fiscal Fein, en secreto, el martes pasado, feriado de Carnaval. La audiencia no se celebró en su fiscalía, sino en la de un colega, Marcelo Roma, que está en el quinto piso de Paraguay 1536.

Stiuso fue habilitado a declarar por el Gobierno, que lo relevó de su obligación de guardar secreto de todo su accionar desde que ingresó a la SIDE hasta el 5 de enero, cuando se efectivizó su jubilación, a la que debió acogerse de manera obligatoria por decisión de la Presidenta.

Ante Fein, dijo que la última vez que había hablado con Nisman fue para las Fiestas, el año pasado. Mencionó, puntualmente, la Navidad. Ninguna comunicación en 2015.

Sí admitió, en cambio, un diálogo más reciente con la ex mujer de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado. Cruzaron comunicaciones después de la muerte del fiscal. Stiuso la llamó y ella le respondió, informaron fuentes judiciales. Fein le preguntó por esa comunicación y Stiuso le relató que había sido una llamada social, para darle las condolencias (ver aparte).

En cuanto a los cruces de llamadas entre el Nextel de Nisman y los teléfonos a nombre de Stiuso, el ex agente afirmó que hacía "años" que Massino utilizaba parte de su flota. El resto de la declaración ya se conoce: dijo que no sabía quién era Lagomarsino y que no trabajó en la denuncia contra la Presidenta.

Desde que lo jubilaron, se supo muy poco del paradero de Stiuso. Página 12 informó ayer que después de declarar cruzó a Uruguay por el paso fronterizo de Colón, Entre Ríos. Pero ese bien podría no ser su destino final.