"Era una mujer formidable"
El diputado Alfonso Prat Gay, quien trabaja en la fundación de Amalia Fortabat, la recordó como una mujer "inteligente, culta y generosa".
La muerte de Amalita Fortabat impactó en el corazón de muchos. Es que la mujer de 90 años era muy querida por sus obras benéficas y por cómo era como persona. Quien habló sobre su muerte y la recordó de la mejor manera fue Alfonso Prat Gay. "La conocí cuando vendió Loma Negra. Desde entonces estuve con ella administrando lo que entró por la venta de la compañía y en la parte final de la fundación. Estoy en el consejo de su fundación", contó el diputado de la Coalición Cívica, quien además destacó: "No conocí su etapa empresarial. Conocí la etapa final donde se iba despidiendo, la que se dedicaba a devolver todo lo que había recibido. Era inteligente, culta y sobre todo, generosa. Siempre hacía lo que estuviera a su alcance para resolver muchas cuestiones. Muchísimas donaciones anónimas, algunas que ni siquiera yo me daba cuenta".
Además, Prat Gay dialogó con "Chiche" sobre la Fundación Amalia Lacroze de Fortabat. "El museo Fortabat pertenece a la fundación. La fundación podría vender las pertenencias pero recién en algunos años y sólo con un fin benéfico. No es patrimonio de la Argentina. Estableció una cláusula para que no se pueda vender".
Finalmente, el diputado contó algunas de sus caridades que hizo durante su vida. "Si leía en el diario que a un chico de Catamarca le faltaba una silla de ruedas ella mandaba a comprar una y se la lleva sin que nadie se entere. Cuando se enteró que volvían los combatientes de las Islas Malvinas, iba dos o tres veces por semana a darle aliento, le mandaba pasajes a los familiares para que vengan a verlo. Y ahora, si Dios quiere, en un par de meses se inaugura un jardín en La Cava. No un simple jardín, sino uno donde las madres adolescentes puedan dejar a su hijo tranquilo".
Además, Prat Gay dialogó con "Chiche" sobre la Fundación Amalia Lacroze de Fortabat. "El museo Fortabat pertenece a la fundación. La fundación podría vender las pertenencias pero recién en algunos años y sólo con un fin benéfico. No es patrimonio de la Argentina. Estableció una cláusula para que no se pueda vender".
Finalmente, el diputado contó algunas de sus caridades que hizo durante su vida. "Si leía en el diario que a un chico de Catamarca le faltaba una silla de ruedas ella mandaba a comprar una y se la lleva sin que nadie se entere. Cuando se enteró que volvían los combatientes de las Islas Malvinas, iba dos o tres veces por semana a darle aliento, le mandaba pasajes a los familiares para que vengan a verlo. Y ahora, si Dios quiere, en un par de meses se inaugura un jardín en La Cava. No un simple jardín, sino uno donde las madres adolescentes puedan dejar a su hijo tranquilo".