Entre el cielo y el infierno: Guillermina Valdes habló de sus ex, Tinelli y Ortega
Superado un año complicado, la modelo contó detalles de su relación con los productores y lo que sufrió cuando se conoció su relación en los medios.
Superada su separación con Marcelo Tinelli y ya fuera del ojo de la tormenta, Guillermina Valdes habló de su vuelta al trabajo, de su ex marido Sebastián Ortega y de la relación que tuvo con el conductor de Showmatch.
"Yo no busqué mi relación con Marcelo y no creo haber cometido un pecado", dijo a revista Gente, en respuesta a todos los que la juzgaron en su momento.
Sobre la supuesta relación de amistad entre su ex marido y Tinelli, Guillermina se muestra algo desentendida: "Yo sabía que ellos trabajaron juntos pero Marcelo nunca vino a mi casa, nunca habíamos cruzado más que un 'Hola ¿Qué tal?', no puedo decir si eran amigos. En el ambiente capaz cuando alguien te da una oportunidad se le dice amigo, pero yo no lo viví así".
"Mi relación con Marcelo fue verdadera, me jugué por lo que sentía. Yo me enamoré y me metí hasta la médula. Pero es feo y difícil que te juzguen todo el tiempo. Todos hablan de mi cuando en ese entonces la mujer de Sebastián ya era Ivana", dice la modelo.
Respecto a que todo se debió a una pelea por el rating, Guillermina responde: "Es una forma muy fea de minimizarme y de subestimar lo que todos sentíamos".
Sobre la reacción tal vez algo desmedida de Sebastián al enterarse que ella estaba con Marcelo, Guillermina entiende que puede deberse a que vivieron otros tiempos: "Yo viví el duelo cuando estábamos todavía juntos".
"No me arrepiento de haberme jugado. Yo con Marcelo fui desde el corazón. No importa cuánto tiempo estuvimos juntos sino que estuvimos bien. No funcionó porque teníamos miradas diferentes de la pareja, no estábamos a la par de lo que queríamos. Además, creo que nos movimos en un terreno que no era próspero para que la semilla germinara", recordó Guillermina.
Respecto al porqué se separó de Sebastián Ortega y a los rumores de infidelidad por parte de él, ella responde: "Puede ser que me haya sido infiel, pero yo no me separé por una infidelidad. No es una historia con buenos y malos. Pusimos lo mejor para mantenernos juntos".
Guillermina desmintió estar en juicio con su ex marido por la cuota alimentaria. Sobre el pasado, se hace cargo de no haber sido ella quien decidiera salir a trabajar, a pesar de que el productor de Underground no quisiera: "Sebastián en realidad no quería que actuara. Cuando estuve en el 2009 en Botineras fue un factor que generó mucho conflicto. De todos modos, uno se tiene que hacer cargo, yo también elegí. Hoy trabajo porque quiero".
"Ahora hasta me juzgaron por volver al trabajar, pero si después de la separación tuve más ofertas laborales, bienvenido", dice descontracturada.
Los tatuajes para Guillermina, es lo único que asemeja a sus dos ex. Para ella, el hecho de que ambos sean hombres poderosos del medio es un hecho casual: "No me fijo en eso. Antes de estar con Marcelo salí dos meses con un chico de Necochea, de bajo perfil. Yo busco que la otra persona pueda estar conmigo a la par, hay que ver si alguien con tan alto perfil puede cumplir con esas expectativas", concluyó la modelo.