Entre colectoras y resistencias
Por Ricardo Kirschbaum. Aunque Cristina mantega el misterio, el kirchnerismo trabaja con la convicción de que será candidata a la reelección en octubre.
Y que tiene que poner todos los recursos políticos y económicos para intentar que gane en primera vuelta y así despejar los eventuales peligros de un balotaje. Atenuado el impacto emocional de la muerte de Néstor Kirchner, que empinó a Cristina en las encuestas, el reacomodamiento está dando cifras más modestas que son seguidas atentamente por la tendencia a la baja . Es cierto también que la Presidenta tiene mejores perspectivas que la que exhibía la candidatura de su esposo, que había encallado en un 30 por ciento del electorado y tenía un mal pronóstico para la segunda vuelta. El tercio, entonces, debe ser ampliado para aspirar al triunfo .
El objetivo principal es la reelección de Cristina. Así, las colectoras que recojan votos del amplio espectro oficialista, sobre todo las que no votarían por Scioli pero sí por Cristina, son alentadas con energía . Esto genera resistencias entre los intendentes que ya le mostraron los dientes a Moyano, cuando desembarcó en el PJ provincial. Ayer, el camionero dio su bendición a las colectoras , en un almuerzo con un sector de la izquierda peronista, y terminó de encender la alarma en el peronismo bonaerense. Moyano ha convocado al partido para el 18 en Mar del Plata. Ya se especula que, si se hace, será una reunión dura . Los "ocho", intendentes críticos, se preparan para lanzar un espacio para distinguirse del oficialismo y dar un apoyo crítico a Scioli, si éste está dispuesto a enfrentar las maniobras de la Casa Rosada.
El kirchnerismo no quiere sorpresas. Por eso trata de forzar la mano en apoyo a Cristina, aun cuando, así, afecte la suerte electoral de Scioli o de los intendentes bonaerenses .