Enfermera podría ir presa por falsificar certificados para justificar ausencias
La empleada, cuya identidad se mantendrá en reserva, fue despedida de su trabajo y ahora afronta un proceso penal en el que podría ser condenada a penas de hasta seis años de cárcel.
La Cámara del Crimen dejó al borde del juicio oral y público a una enfermera del Hospital Garrahan, del barrio porteño de Parque Patricios, acusada de falsificar certificados médicos para justificar sus reiteradas inasistencias.
La empleada, cuya identidad se mantendrá en reserva, fue despedida de su trabajo y ahora afronta un proceso penal en el que podría ser condenada a penas de hasta seis años de cárcel.
La enfermera, según documentación a la que accedió esta agencia, habría presentado "certificados médicos falsos para justificar reiteradas inasistencias en las que incurrió durante el año 2008 y 2009".
Los médicos que presuntamente habían firmado esos certificados desconocieron no sólo los documentos sino siquiera conocer a la enfermera.
"La circunstancia de que se haya decidido la cesantía de laencausada en el marco del sumario administrativo y que se hayanrealizado descuentos dinerarios sobre su sueldo por las inasistencias injustificadas en modo alguno la eximen de responsabilidad", dijeron los camaristas Alberto Seijas y Carlos Alberto González. La enfermera sufrió, además, un embargo sobre sus bienes.
La empleada, cuya identidad se mantendrá en reserva, fue despedida de su trabajo y ahora afronta un proceso penal en el que podría ser condenada a penas de hasta seis años de cárcel.
La enfermera, según documentación a la que accedió esta agencia, habría presentado "certificados médicos falsos para justificar reiteradas inasistencias en las que incurrió durante el año 2008 y 2009".
Los médicos que presuntamente habían firmado esos certificados desconocieron no sólo los documentos sino siquiera conocer a la enfermera.
"La circunstancia de que se haya decidido la cesantía de laencausada en el marco del sumario administrativo y que se hayanrealizado descuentos dinerarios sobre su sueldo por las inasistencias injustificadas en modo alguno la eximen de responsabilidad", dijeron los camaristas Alberto Seijas y Carlos Alberto González. La enfermera sufrió, además, un embargo sobre sus bienes.