En 15 días, dos asaltos
Una banda de delincuentes robó una vivienda de un barrio platense aprovechando que sus dueños habían salido a pasear, en un robo que se convirtió en el segundo que sufren en esa casa en apenas 15 días, según denunciaron sus propietarios.
El matrimonio dueño de la vivienda hace sólo tres meses que se mudó al barrio Malvinas, de esta ciudad, y en apenas dos semanas sufrió dos robos con características similares: los delincuentes rompieron con una masa la pared para aflojar el enrejado y poder ingresar.
En este último robo, cometido ayer por la tarde, los delincuentes rompieron la pared y la ventana y provocaron un importante desorden en la vivienda, para robar dinero, electrodomésticos y herramientas, de acuerdo con lo señalado por el diario El Día de esta ciudad.
Apenas un día antes, los albañiles habían terminado de levantar tres filas más de ladrillos que los dueños hicieron poner en el paredón que rodea la casa, ubicada en calle 146 entre 530 y 531, para tratar de tener mayor seguridad.
Además, reforzaron el enrejado de la ventana por el cual los ladrones habían entrado en el primer robo, pero las medidas de seguridad no fueron suficientes.
Según contó Maide Vargas, la dueña de casa, quien trabaja como enfermera, todo pasó en la tarde de ayer, entre las 14:00, hora en la que se fueron de la vivienda para visitar a unos familiares, y las 18:00, cuando volvieron y encontraron los destrozos.
Los delincuentes utilizaron la misma modalidad que en el caso anterior: rompieron con una masa la pared, para aflojar los hierros del enrejado que protegía la ventana y después de retirarlos, accedieron al inmueble.
Una vez dentro de la vivienda, los desconocidos desordenaron todo: sacaron cajones, dieron vuelta colchones y dejaron ropa tirada, según el testimonio de las víctimas.
Al final, sustrajeron dinero -cuya cifra no se dio a conocer-, un DVD, una amoladora y otras pertenencias.
Pese a que fue durante la tarde, los ladrones actuaron con total impunidad, debido a que ningún vecino se enteró de lo que pasaba.
"Taparon la ventana con una chapa para que no se viera desde el portón", indicó la víctima.
"Así no se puede vivir. Nosotros nos mudamos hace tres meses, porque teníamos el terreno y empezamos a construir. No nos esperábamos esto. Hablamos con los vecinos y nos comentaron que era un barrio tranquilo", dijo Vargas en diálogo con El Día.