Emprendedores en cuarentena: cómo reinventarse y seguir adelante

Jorge Baiz es emprendedor. Junto a su esposa montó un negocio de venta de café y pastelería ambulante en la zona de Once gracias un microcrédito que le otorgó la asociación civil Avanzar. El negocio logró volverse bastante próspero, pero hoy que por la cuarentena sus ingresos son totalmente nulos. Por eso, Jorge decidió reinventarse para poder pagar las cuentas.

Jorge es de esa generación a la que enseñaron que "el saber no ocupa lugar", por eso ostenta con orgullo algunos títulos. Es técnico en computación y electricista. "Como aprendí a reparar computadoras, hoy encontré una salida laboral por ese lado. Claro que igualmente es difícil porque sólo puedo llegar a gente del barrio y tomando todos los recaudos necesarios", narró.

"Dado que todo el mundo está haciendo home office y necesita una tablet o una notebook para trabajar, le encontré la vuelta. Me reinventé. Guardé el carrito de café hasta que todo esto pase y me volqué a este otro oficio que me garantiza un ingreso chico pero seguro", agregó para describir cómo se amoldó a esta situación que de golpe, nos cambió la vida a todos. 

Para arrancar en este nuevo rubro, Jorge vendió una computadora que tenía para obtener efectivo con el que pudiera pagar la olla durante los primeros días de aislamiento. Con ese dinero, se las arregló hasta que apareció el primer cliente.

"Hoy día se habla que el brazo del Gobierno tiene que llegar a todos los rincones. Creo que el comerciante, la PyME, el emprendedor, tienen que reinventarse", opinó.

Y continuó: "Si me hubiera quedado llorando, mi familia estaría sufriendo y reclamando ayuda. Los laburantes, sin excepción, tenemos que tener la madurez necesaria para aportar a la solución global".

"En lugar de abrir la boca como el pollito para que nos pongan el gusanito, tenemos que abrir las alas y salir a buscarlo", finalizó.