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Embarazada perdió a su bebé en un asalto

Se trata de una joven embarazada de 27 semanas, quien fue baleada en la panza al quedar en medio de un tiroteo entre policías y ladrones en la ciudad de Paraná.

Fuentes policiales aseguraron que el hecho ocurrió la madrugada del domingo en el barrio Gaucho Rivero, de Paraná, y el bebé murió en las últimas horas tras permanecer en gravísimo estado y en terapia intensiva en el Hospital Materno Infantil "San Roque".

La madre del bebé fallecido, de 19 años y pareja de uno de los jóvenes que se tiroteó con la policía de Paraná, se encuentra en buen estado de salud, dijeron las fuentes.

Según los investigadores, todo comenzó la noche del sábado pasado, cuando vecinos de las calles 1008 y 1311 del barrio Gaucho Rivero, de la zona sudoeste de Paraná, llamaron a la policía para denunciar que integrantes de dos familias del barrio se estaban peleando y enfrentando a balazos.

Unas horas después, cerca de las 5 de la madrugada del domingo, efectivos policiales divisaron a dos sujetos que aparentemente habían participado de la pelea y les ordenaron que se detengan para identificarlos.

Sin embargo, según las fuentes policiales, los jóvenes extrajeron armas y dispararon contra los efectivos policiales, por lo que se generó un intenso tiroteo.

El enfrentamiento terminó con la detención de cinco personas que portaban revólveres calibres 32 y 38 milímetros, y que fueron alojadas en la alcaídia de los tribunales locales.

Durante el tiroteo, la mujer embarazada de siete meses de uno de los protagonistas recibió un disparo en el abdomen que le provocó una herida con orificio de entrada pero sin salida, que afectó al bebé que llevaba en su vientre.

La mujer fue derivada de inmediato al Hospital Materno Infantil, donde los médicos la llevaron de inmediato a quirófano y le practicaron una operación de cesárea.

Fuentes policiales dijeron que el bebé nació con un kilo de peso y presentaba heridas en la mano y la pierna izquierda.

El grupo de médicos que asistió al bebé reveló que, además de los balazos, era prematuro, lo que le ocasionó alteraciones en el sistema nervioso central y hemorragias y sus pulmones no tenían un funcionamiento adecuado. Finalmente, el bebé falleció anoche, explicaron las fuentes policiales.

Debido a la confusa situación y a las denuncias cruzadas entre la policía y los familiares del bebé fallecido, el juez de Instrucción Elvio Garzón dispuso que el levantamiento de rastros y las tareas de criminalística las efectúe personal de Gendarmería.

En tanto, el cuerpo de bebé fallecido fue trasladado a la morgue para que se le practique una autopsia.