El "Tata" de estreno: Gerardo Martino dirigió su primera práctica en Barcelona
Hoy Martino llegó a la ciudad deportiva Joan Gamper y dio la primera charla ante el plantel profesional antes de comenzar el primer entrenamiento del ciclo.
El argentino Gerardo Martino puso en marcha este lunes su proyecto como nuevo técnico del Barcelona dando una primera charla a todo la plantilla, con Leo Messi y Neymar a la cabeza. En esta primera reunión con sus nuevos pupilos puso el acento en mantener la mentalidad ganadora.
El exseleccionador de Paraguay habló frente al grupo en el campo de juego de la Ciudad Deportiva Joan Gamper, para una primera práctica en la que también asistieron todos los internacionales que gozaban de descanso prolongado por la Copa de las Confederaciones.
El Tata presentó a su cuerpo técnico y dio los primeros trazos de lo que pretende para su proyecto en el Barça, luego de ser contratado como sucesor de Tito Vilanova, quien debio abandonar el cargo para centrarse en su lucha contra un cáncer que le impedía ejercer el cargo a pleno.
Martino estuvo el fin de semana pasado en la grada viendo la goleada 7-0 del Barcelona frente a un elenco local en Oslo y ahora le tocará enfrentar en Gdansk al Lechia, en un amistoso que tenía pautado el club antes del anuncio de la renuncia de Vilanova.
"Tata nos dijo que no nos cansemos de ganar", reveló el portero blaugrana Víctor Valdez. "Por lo poco que hemos podido hablar parece muy cercano, tanto él como sus ayudantes. Es una persona ilusionada con un proyecto que es de gran magnitud y querrá darle su sello personal e intentar que no nos cansemos de ganar. Saldrá bien", añadió el arquero a la prensa española.
Martino aprovechó la vuelta al trabajo de todos los internacionales azulgranas que disputaron la Copa de las Confederaciones en Brasil, y que tenían un período de descanso extra, para juntar a toda su fuerza y arrancar el nuevo proceso.
Los brasileños Dani Alves y Neymar, y los españoles Victor Valdés, Jordi Alba, Gerard Piqué, Sergio Busquets, Cesc Fàbregas, Andrés Iniesta, Xavi y Pedro, que regresaron a las instalaciones del Barcelona para hacerse los chequeos médicos de rutina, se quedaron con una buena primera impresión del Tata.
Tras cuatro años gloriosos con Pep Guardiola como entrenador, entre 2008 y 2012, en los que el Barça ganó 14 títulos, y la continuidad del proceso a través de la sucesión de Vilanova, ayudante de campo del actual DT del Bayern Múnich en aquel período, Martino inicia una nueva era en en el Camp Nou, que supone tal vez un cambio de estilo de juego.
El desafío para el Tata será mantener esa constancia de triunfos, inyectando un mensaje distinto al fútbol que practicaron durante los últimos cinco años estos mismos jugadores.
El exvolante argentino de 50 años llega a la capital catalana con la reciente consagración en el torneo de la Argentina con su querido Newells Old Boys, al que tomó hace un año en zona de peligro de descenso y también lo colocó en semifinales de la Copa Libertadores.
Con un fútbol práctico, efectivo y ofensivo, Martino se ganó amplios elogios de la crítica argentina, que ya lo destacaba por su labor al frente de la selección de Paraguay en Sudáfrica-2010 (cuartos de final, derrota 1-0 ante el futuro campeón España) y la Copa América-2011 (subcampeón tras Uruguay, derrota 3-0).
El exseleccionador de Paraguay habló frente al grupo en el campo de juego de la Ciudad Deportiva Joan Gamper, para una primera práctica en la que también asistieron todos los internacionales que gozaban de descanso prolongado por la Copa de las Confederaciones.
El Tata presentó a su cuerpo técnico y dio los primeros trazos de lo que pretende para su proyecto en el Barça, luego de ser contratado como sucesor de Tito Vilanova, quien debio abandonar el cargo para centrarse en su lucha contra un cáncer que le impedía ejercer el cargo a pleno.
Martino estuvo el fin de semana pasado en la grada viendo la goleada 7-0 del Barcelona frente a un elenco local en Oslo y ahora le tocará enfrentar en Gdansk al Lechia, en un amistoso que tenía pautado el club antes del anuncio de la renuncia de Vilanova.
"Tata nos dijo que no nos cansemos de ganar", reveló el portero blaugrana Víctor Valdez. "Por lo poco que hemos podido hablar parece muy cercano, tanto él como sus ayudantes. Es una persona ilusionada con un proyecto que es de gran magnitud y querrá darle su sello personal e intentar que no nos cansemos de ganar. Saldrá bien", añadió el arquero a la prensa española.
Martino aprovechó la vuelta al trabajo de todos los internacionales azulgranas que disputaron la Copa de las Confederaciones en Brasil, y que tenían un período de descanso extra, para juntar a toda su fuerza y arrancar el nuevo proceso.
Los brasileños Dani Alves y Neymar, y los españoles Victor Valdés, Jordi Alba, Gerard Piqué, Sergio Busquets, Cesc Fàbregas, Andrés Iniesta, Xavi y Pedro, que regresaron a las instalaciones del Barcelona para hacerse los chequeos médicos de rutina, se quedaron con una buena primera impresión del Tata.
Tras cuatro años gloriosos con Pep Guardiola como entrenador, entre 2008 y 2012, en los que el Barça ganó 14 títulos, y la continuidad del proceso a través de la sucesión de Vilanova, ayudante de campo del actual DT del Bayern Múnich en aquel período, Martino inicia una nueva era en en el Camp Nou, que supone tal vez un cambio de estilo de juego.
El desafío para el Tata será mantener esa constancia de triunfos, inyectando un mensaje distinto al fútbol que practicaron durante los últimos cinco años estos mismos jugadores.
El exvolante argentino de 50 años llega a la capital catalana con la reciente consagración en el torneo de la Argentina con su querido Newells Old Boys, al que tomó hace un año en zona de peligro de descenso y también lo colocó en semifinales de la Copa Libertadores.
Con un fútbol práctico, efectivo y ofensivo, Martino se ganó amplios elogios de la crítica argentina, que ya lo destacaba por su labor al frente de la selección de Paraguay en Sudáfrica-2010 (cuartos de final, derrota 1-0 ante el futuro campeón España) y la Copa América-2011 (subcampeón tras Uruguay, derrota 3-0).