El santuario de Candela
El cruce de la Avenida Vergara con el Acceso Oeste, lugar donde se encontró el cuerpo sin vida de Candela Rodríguez se transformó en un santuario. Allí se colocó una cruz de madera, con dos fotos de la niña de 11 años asesinada y algunas flores.
Los vecinos de Villa Tesei, localidad de Hurlingam, siguen conmovidos por la desaparición física de Candela, quien estuvo cautiva durante más de una semana y finalmente fue asfixiada.
Por eso, una manera de recordarla fue colocar una cruz en el terreno donde una cartonera encontró el cadáver de la niña.
Algo parecido ocurre con el domicilio de la familia Rodríguez, en el cual se puede apreciar como cientos varios vecinos pegan sus plegarias para la niña y también los compañeritos de la escuela y scouts que pegan a la fachada de la casa sus cartulinas con sus sentimientos y reclamos de justicia, para resolver el caso próximamente.