El Robo de las joyas a Mirtha: Lina se defendió por la TV y eligió "Chiche en vivo"
La exempleada de la señora aprovechó la falta de mérito que le caratuló el juez de la causa para mostrarse en público y contar el lado B de la historia del robo millonario.
Lina Rosa Díaz, la exmucama de la señora Mirtha Legrand, era una de las principales sospechosas del robo de la caja de seguridad del departamento de la diva. El juez caratuló la causa como "falta de mérito". En el programa "Chiche en vivo", Lina contó cómo fue su relación con la actriz y conductora, sus años de servicio y el abrupto final de la relación laboral con escándalo incluido.
Ante las preguntas incisivas del conductor Chiche Gelblung, Lina contó: "Trabajé 21 años consecutivos, siempre con buen trato, era una relación laboral, por eso siempre me volvieron a llamar, porque sino una estrella como ella si no le caen bien no te llaman. En el programa siempre fui yo la que servía. Me convocaron con otra señora y cada año volvía a trabajar, y por eso no tomaba otros trabajos. Quedaba tres meses sin trabajar, y no podía tomar otro. En esos tres meses no me pagaban".
En ese sentido, explicó: "Me decían 'ya empezamos'. Después comencé a trabajar en su casa, porque en esa casa fui contratada como la cocinera de la casa. Yo trabajé con la Legrand, que es una señora de un buen paladar. En todos los lugares yo cocinaba y después servía. Ella estaba muy tranquila conmigo, porque nunca tuve ninguna queja".
"Yo le pasaba la factura a Elvira y ella me pagaba. Está vestida de mucama pero hace muchas funciones, es una señora muy trabajadora y muy práctica. Hace muchos años que está en la casa y tiene mucha confianza. Las cosas de la casa las maneja Elvira, y sabía mi petición, pero no se podía hacer más nada. Tal vez fue una locura lo que yo hice, pero era lo que necesitaba hacer", dijo la exmucama.
Cuando habló del tema más importante, que fue cuando se enteró del robo, Lina se dejó ver triste y nerviosa a la vez. Gesticulaba mucho cuando contó la crónica de lo sucedido: "El día del robo yo no estuve. Me entero al otro día por una vecina que me golpeó la puerta. Cuando fui a la casa me encontré con una escena espantosa. La señora estaba muy mal, Elvira también. Estábamos todos aterrados".
Cuando la policía le allanó su casa, Díaz aseguró: "La señora me quiso dar una colaboración para que yo arreglara un baño que tenía roto. Yo le comenté a la señora que me habían allanado la casa porque sospechaban de mí por el robo. Ella me dijo que no tenía nada que ver y llamó a la fiscal para preguntar por qué habían hecho eso. Después Elvira le dijo que las cosas de mi casa están rotas, que había sido una vergüenza, y le dijo que había que compensarlo, y la señora me dijo 'no te voy a pagar nada, yo no tengo nada que ver".
Cuando me allanaron pensé que eran ladrones, y no me explicaron nada. De hecho yo les mostré una foto que tenía con Mirtha Legrand y les dije que yo trabajaba ahí, y los policías se mataron de la risa", cerró.