El reino del revés
Los subsidios del Ministerio de Planificación Federal dirigido a sectores productivos favorecen abiertamente a la Capital Federal en desmedro de otras provincias.
El proceso que recién se inicia en torno a la "desubsidiación" de la economía argentina permite visualizar un punto de partida realmente preocupante
1. Sectorial. Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, Iaraf, en el año 2010 las transferencias corrientes de la Administración Nacional sumaron $ 104.798 millones.
Los importes mayores se dirigieron a:
Empresas privadas: electricidad, productos básicos, subterráneos, transporte, con el 28%.
Empresas públicas del Estado Nacional 18%.
Asignaciones familiares 18%.
Provincias y municipios 12%.
Universidades 12%.
Otros.
Los mayores crecimientos de los últimos años se han dirigido a las empresas públicas y privadas
.
2. Regional. En relación a la distribución regional de los subsidios del ministerio de Planificación Federal que va dirigido a los sectores productivos, especialmente energía y transporte, se aprecia una distribución que acentúa la centralización característica de la República Argentina.
Así, la Capital Federal percibió el 77% de los recursos y la provincia de Buenos Aires el 7%. Mendoza el 0,53%
Si se analiza per-cápita, esto es, se divide el total de transferencias por la cantidad de habitantes la distorsión es notable:
$/habitante
Capital Federal 8.797
Santa Cruz 1.477
La Pampa 796
Buenos Aires 156
Mendoza 105
Santa Fe 40
Frente a todo ello, merece preguntarse:
¿cuál es la lógica inversa que acentúa las distorsiones existentes?
La gradual eliminación de los subsidios no debe ocultar el hecho de que, a futuro, las
provincias menos favorecidas (Mendoza) debieran exigir una compensación por tantos años de imperio del "reino del revés".