El problema está en la generación
* Por Guillermo Kellmer. La ecuación es simple: a más basura, mayor mercado para el cartoneo. En 2010 la Ciudad de Buenos Aires generó un nuevo récord de residuos enviados a la Ceamse.
Y, obviamente, toda esa basura pasó previamente por las calles. El material reciclable no se queda afuera y así las cooperativas de cartoneros organizadas tienen con los ilegales un dura competencia.
Pero el problema pasa por la generación. Buenos Aires está a años luz de los mandatos internacionales en cuanto a reciclaje de basura. La apuesta oficial pasa por la separación en el hogar y que los cartoneros ya incorporados al sistema se conviertan en recolectores. Así y todo, seguimos estando lejos.