El pasado flogger de Fernando Jones Huala, el líder mapuche
Hoy lidera la organización que reivindica la lucha armada para recuperar tierras en el sur del país.
Fernando Jones Huala hoy lidera la RAM (Resistencia Ancestral Mapuche), una organización que reivindica la lucha armada para recuperar tierras que en su momento ocuparon los mapuches. Pero ahora se conoció parte de su pasado que poco coincide con su presente: fue parte de los flogger, la tribu urbana que fue furor en el país hace diez años.
Hermano de Facundo, preso en Esquel por haber incendiado una casa con la familia adentro, Jones Huala lideró la protesta que la comunidad Mapuche hacía en la Ruta 40, en Resistencia Cushamen, Chubut, el 1° de agosto. El mismo día que fue el operativo de la Gendarmería donde se denuncia la desaparición de Santiago Maldonado. Subido en su caballo, Fernando impidió que los rastrillajes lleguen dentro del lof, terreno sagrado donde viven los mapuches.
El líder mapuche era flogger, MEJOR PAÍS DEL MUNDO. pic.twitter.com/nV1818i94M
— Atendedor (@hellr00t) 15 de septiembre de 2017
Un día antes de la desaparición de Maldonado, el ex flogger fue detenido junto a dos compañeras de la RAM. Tenía un "Manual de Guerra", un cuchillo y un papel con indicaciones: una de ellas llamaba a dar un "golpe de prensa".
"Este trabajo que estamos llevando los jóvenes es el legado de la palabra Mapuche, es la experiencia que vivieron los antepasados, es el conocimiento y la sabiduría que no se debe perder. Nosotros estamos trabajando para que no se pierda ese legado milenario de los Mapuches", dice hoy Fernando Jones Huala.
Sin embargo, hace unos años, sus intereses eran diferentes: participaba de las juntadas flogger en el Abasto y era activo en las redes sociales, principio básico de la tribu urbana que lideraba Agustina "Cumbio" Rivero.
En el país fue furor la tribu urbana durante 2007 y 2010. El lugar de encuentro elegido en la Ciudad de Buenos Aires era el shopping Abasto y a partir de determinada hora era imposible transitar la zona sin encontrarse con adolescentes vestidos con colores flúo, pelo con raya al costado y planchados, y zapatillas de una marca en particular. Todo sin distinción de género.