El novio de Erica afirma que estuvo investigando por su cuenta

El novio de Érica Soriano, la mujer embarazada de dos meses desaparecida desde el 21 de agosto pasado, apareció sorpresivamente el miércoles en una fiscalía de Lomas de Zamora.
 
Daniel Lagostena sostuvo ante la Justicia, que ingresó en dos prostíbulos de Misiones con el fin de encontrar a su pareja, en una clara presunción de que Érica haya sido secuestrada por una red de trata de personas.

Asimismo, habría afirmado que "temía por su seguridad", comentario que también había dejado de manifiesto luego de desaparecer el pasado domingo 5 de septiembre, siendo blanco de todas las miradas, en un mail que envió a distintos medios y en una carta que dejó a su padre. Allí, entre otras cosas, mencionaba: "No quiero ser un chivo expiatorio", en referencia al accionar policial y a la repercusión que tomó el caso.

El hombre fundamentó su decisión en que sufría una gran "angustia", y que además buscó investigar por su cuenta. Por eso, declaró en la fiscalía 7 de Lomas de Zamora.

Con esto, su testimonio generó aún más desconcierto. Al respecto, María Esther Cohen Rúa, titular de la Comisión Esperanza afirmó que:  "Es una persona muy intelectual, no es improvisado. Creemos que decidió irse porque maneja un secreto que le resulta insostenible, y que ya no podía sostener su propio estado emocional", dijo. "La idea es, de alguna manera, sacarlo de su ‘caja’, que se vea necesitado a salir a responder", agregó.

Hasta el momento, no hay rastros certeros del paradero de Érica, de 30 años, que desapareció cuando salió de su casa de Lanús con rumbo supuestamente a Villa Adelina, a la casa de su madre. En tanto, en esa localidad realizaron ayer una nueva marcha para pedir por su pronta aparición. Además, momentos antes de que Lagostena declarara, los investigadores realizaron un nuevo allanamiento y rastrillaje en un campo ligado a su círculo cercano, aunque no tuvo éxito.