El milagro está de moda

Los pedidos de milagros fueron creados para pedir en forma masiva, ayuda ante un grave problema de enfermedad, donaciones, cirugías, trasplantes, etc., pero con el correr del tiempo se familiarizaron los pedidos para intentar bromas como en el caso de River o RiBer haciendo alusión al descenso del club millonario.

El caso particular que nos convoca fue el seguimiento de una idea singular, desinteresada y hasta jocosa que se generó en el pase del programa de Gustavo Sylvestre a Jorge Rial por radio La Red. En el mismo, después de escuchar el spot publicitario en la tanda, salió la idea de darle una mano a Jorge Altamira, el candidato de la izquierda que estaba pidiendo votos para llegar al mínimo establecido por la ley electoral.

Del dicho al hecho fue la consigna y armaron el hashtag #unmilagroparaltamira para que los seguidores de ambos periodistas en Twitter se sumen a la campaña.

Rápidamente, tomamos el guante del convite público hecho y, junto a la empresa Global News Social Eyes, comenzamos a investigar desde el minuto cero hasta el final el movimiento mediático y de redes sociales que el hecho producía. Así fue como en la semana del 05 al 12 de agosto se registraron más de 4.000 repercusiones que mencionaban #unmilagroparaltamira.

Más aún, durante el fin de semana de las elecciones las menciones llegaron a más de 2.000, presentándose el pico más importante de la campaña. Cuando los usuarios vieron que Altamira había obtenido los votos necesarios para pasar a las elecciones de octubre, explotaron las redes sociales, comenzaron a twittear acerca de que el “milagro fue posible” y de que "las redes sociales todo lo pueden".

Esto demuestra que la reputación de quien menciona algo dentro de las redes sociales es importante, Altamira fue trend topic en cuestión de segundos y supo mantenerse en ese lugar por más de 24 horas.

Google reporta a la fecha 37.000 resultados solamente con la búsqueda de unmilagroparaltamira. Por su parte, los medios audiovisuales tampoco quedaron al margen, una amplia mayoría al comentaban que "el milagro se hizo realidad".

¿Realidad o ficción? ¿Altamira entró por las redes sociales? Eso sería un estudio mucho más avanzado y no para contestar tan rápidamente, pero de que fue un gran disparador no quedan dudas. Mediante esta acción, la gente conoció de quién se hablaba y pudo discutir si estaba bien el piso exigido, si era correcto, aunque sea entrando risueñamente al juego y luego averiguando quién era Jorge Altamira.

De lo que estamos convencidos es de que en la extrapolación de la noticia fijada casi inconcientemente al razonamiento conciente de la actividad, seguramente ha influenciado y mucho, porque algunos desprevenidos fijaron la atención en la problemática que los candidatos estaban publicitando.