"Él luchaba contra sí mismo"
El hombre que mató a su propio hijo, alegando un acto de defensa, habló esta mañana con "Chiche" Gelblung. ""Estoy muy arrepentido de lo que hice", dijo.
Roberto Iturrieta, es papá de Martín, el joven al que baleó él mismo el domingo pasado, tras una secuencia altamente violenta donde su hijo amenazó a toda su familia con un cuchillo.
"Desde los 12 hasta los 30 años tuvo problemas con la droga. Era adicto a la cocaína, el rivotril y era alcohólico. Tengo una hija mayor de 33 años y una nena de 3 años", señaló.
"Martín hizo muchos tratamientos. Él luchaba contra sí mismo. Pero siempre perdía en la lucha. Él no trabajaba, limpiaba vidrios en las esquinas, nunca tuvo un trabajo fijo", señaló.
"Yo siempre lo banqué en todos los sentidos. Quizás eses fue el problema, mis allegados me decían que lo dejara solo para que reflexionara pero era difícil dejarlo solo, pero siempre era yo el que lo cobijaba", sostuvo.
"Siempre íbamos a las reuniones de familia, era algo cotidiano el tema de la adicción, yo siempre le decía `tu trabajo es el trabajo de falopero´, él se curaba para no trabajar, así fue toda su vida", señaló.
"Ese día llegó a casa como nunca había llegado, con una agresividad que jamás le habia visto. Él trabajaba conmigo y yo le administraba el dinero, esa noche me pedía su dinero, pero no se exactamente que es lo que quería, me empezó a romper la casa, rompió los vidrios, apuñaló el televisor, yo el arma la tengo desde el 92, pero nunca la usé, fui una vez a un tiro en Quilmes, siempre la tenía escondida en un ropero", dijo.
"Estoy muy arrepentido de lo q hice, cada hora que pasa me pregunto si no tenía otra alternativa, es terrible cada minuto q pasa", finalizó.
"Desde los 12 hasta los 30 años tuvo problemas con la droga. Era adicto a la cocaína, el rivotril y era alcohólico. Tengo una hija mayor de 33 años y una nena de 3 años", señaló.
"Martín hizo muchos tratamientos. Él luchaba contra sí mismo. Pero siempre perdía en la lucha. Él no trabajaba, limpiaba vidrios en las esquinas, nunca tuvo un trabajo fijo", señaló.
"Yo siempre lo banqué en todos los sentidos. Quizás eses fue el problema, mis allegados me decían que lo dejara solo para que reflexionara pero era difícil dejarlo solo, pero siempre era yo el que lo cobijaba", sostuvo.
"Siempre íbamos a las reuniones de familia, era algo cotidiano el tema de la adicción, yo siempre le decía `tu trabajo es el trabajo de falopero´, él se curaba para no trabajar, así fue toda su vida", señaló.
"Ese día llegó a casa como nunca había llegado, con una agresividad que jamás le habia visto. Él trabajaba conmigo y yo le administraba el dinero, esa noche me pedía su dinero, pero no se exactamente que es lo que quería, me empezó a romper la casa, rompió los vidrios, apuñaló el televisor, yo el arma la tengo desde el 92, pero nunca la usé, fui una vez a un tiro en Quilmes, siempre la tenía escondida en un ropero", dijo.
"Estoy muy arrepentido de lo q hice, cada hora que pasa me pregunto si no tenía otra alternativa, es terrible cada minuto q pasa", finalizó.