El incómodo cruce de Zámolo y Nalbandian detrás de cámara en lo de Susana
La modelo participó de "Mi hombre puede" junto a su novio. El tenista, con quien tuvo un romance que nunca fue oficializado, también estaba allí para ser entrevistado por la diva. Enterate qué sucedió.
Esta noche se dio una particular situación detrás de cámara en el programa de Susana Giménez. Sofía Zámolo fue invitada a jugar en la sección del ciclo "Mi hombre puede" con su novio, Gastón Rossetto, mientras que el tenista David Nalbandian, con quien tuvo un romance en el pasado, también se encontraba en el estudio.
La relación de Zamolo y Nalbandian nunca fue oficial ni pública ya que el tenista salía por entonces con su novia de siempre, Victoria Bosch, quien hoy su mujer y madre de su hija. A Zámolo se le vio particularmente nerviosa durante el programa, ya que Nalbandian se encontraba a unos metros de distancia esperando a ser entrevistado por la diva.
El conflicto entre ellos dos data de varios años atras, cuando, según indican los rumores, Zámolo hizo correr fotos de ellos arriba de un camello después de haber terminado la relación con el tenista. Este hecho provocó que Nalbandian le haga "la cruz".
Las malas lenguas de entonces dijeron que como Nalbandian no la blanqueaba como novia, Zámolo filtró las fotos con el objetivo de presionarlo, pero son rumores del medio que nunca fueron comprobados. Lo cierto es que si no hubiesen aparecido aquellas fotos, nunca hubiesen existido pruebas concretas de aquel romance.
En una entrevista hace no mucho tiempo, la modelo habló sobre la relación que mantuvieron: "Estuve once meses de novia. Yo era la boluda que después de mucho tiempo me enteré que estaba con su ex, era una boluda enamorada, pobre ingenua. Éramos jóvenes, hoy tenemos buena relación".
Sin embargo, según pudo saber RatingCero.com, hubo un cruce en el estudio de Martínez que fue incómodo para la modelo y el tenista ya que ella se encontraba con su novio. Además, el romance entre ellos dos nunca había sido conocido públicamente.
Como frutilla del postre, Zámolo y su novio se ganaron el auto del concurso, lo que sirvió para dejar atrás una noche de nervios y fantasmas del pasado que volvieron a la vida de la modelo.