El hombre biónico

Ángel Sanguino, técnico electrónico de Caracas, Venezuela, el año pasado perdió su brazo izquierdo en un accidente con su moto, recientemente ha sido galardonado con el Premio de Ciencias, Tecnología e Innovación, por haber construido un ingenioso brazo robótico que le permite realizar varias tareas.

De 33 años, Sanguino estaba manejando su moto cuando fue atropellado por un auto que participaba de una carrera ilegal. Fue llevado al quirófano y los médicos se vieron obligados a amputarle el brazo izquierdo, completo. Esto fue devastador para el técnico electrónico que trabajaba para una prestigiosa fábrica de partes para computadoras. Y la razón de su desánimo fue que ya no podría hacer su trabajo con un solo brazo.

El ortopedista le dijo a Ángel que debería aceptar su discapacidad y seguir con su vida, pero él tenía otros planes. Mientras estaba en recuperación luego de la cirugía, daños severos en sus órganos internos y con sus piernas fracturadas, Sanguino se enteró que iba a ser padre en poco tiempo, y eso le dio la fuerza para pelear por su vida y por su familia.

Tres meses después del accidente, el joven venezolano usó toda su experiencia como dibujante para diseñar una prótesis que le permitiría reparar los componentes electrónicos tal como lo hacía antes.

Y lo logró creando un brazo artificial que le permite hacer todo lo que necesita, controlándolo con la clavícula. No se fijó en la estética sino en la funcionalidad de su nuevo brazo.