El gordo, el flaco y el forjador: tres estructuras muy curiosas de origen desconocido
Estos tres testigos silenciosos del paso del tiempo yacen incólumes frente a nuestro trajín cotidiano. Un breve stop y una mirada atenta bastan para advertir cuán interesante es nuestra ciudad.
El Gordo
Este bloque de metal que se asemeja a un obelisco rechoncho es uno de los tantos mojones que demarcan el límite entre Capital Federal y Provincia de Buenos Aires. El monolito que aquí registramos –solitario bajo la lluvia- está sobre la colectora de Av. General Paz del lado de Provincia, casi empotrado en Ciudadela. Es uno de los 10 mojones que quedan y fueron colocados antes de la construcción de la avenida de circunvalación que llevaría el nombre de General José María Paz y, actualmente, General Paz. Sirvieron para establecer el trazado de la misma. Cada mojón tiene una altura aproximada de 80 centímetros. De un lado dice “Capital Federal” y del otro “Provincia de Buenos Aires”. Por el centro del mojón pasa el límite exacto entre Provincia y Capital. Pues entonces a las pruebas me remito para derribar un mito: resulta que toda la avenida está del lado de Capital.
El Flaco
En las proximidades del Centro Cultural Recoleta llama la atención una columna. ¿Es un monumento donado por alguna colectividad? ¿Qué representa? ¿Acaso es conmemorativa de algún suceso importante de nuestra historia? Nada más lejos. Es la ventilación de los baños subterráneos que, antiguamente, supo tener cuatro faroles de hierro forjado rodeando el cuerpo superior. Estuvieron hasta la década del 70 pero la columna, hoy sin función, sigue allí en pie hablándonos de su pasado para nada artístico pero muy funcional.
El Forjador
En Monserrat, a la altura del 500 de la calle Perú, funciona una disco donde, inicialmente, hubo una fábrica de molinos de viento y herramientas rurales. El edificio construido por el arquitecto Lorenzo Siegerist es representativo de la arquitectura industrial y fue inaugurado en 1894. Las piezas de hierro llegaron en barco desde Francia y fueron elaboradas en la fábrica de Alexandre Gustave Eiffel, sí, el mismísimo de la torre parisina. En lo alto, se destaca la escultura de “El forjador” que representa el poder para transformar los metales. El lugar sirvió en 1989 de locación para la filmación del clip de "En la ciudad de la furia" de Soda Stereo. Este edificio está en el mismo solar en que vivió Vicente López y Planes, autor de la letra del Himno Nacional Argentino. Aquella casa se demolió en 1906. 
Dejá tu comentario