El Gobierno lanza la “fase 3” del plan económico: más ajuste, reformas estructurales y flexibilización del cepo

Después de meses de negociaciones, el Gobierno logró la aprobación del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que contempla un préstamo de US$20.000 millones. De ese monto, US$12.000 millones serán desembolsados este martes, mientras que el resto llegará en tramos hasta completar US$15.000 millones en 2025.

En este contexto, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, anunciaron el inicio de la denominada “fase 3” del programa económico. Entre las principales medidas se destaca la casi total eliminación del cepo cambiario: ya no habrá un tope de US$200 por mes para acceder al dólar y se levantarán muchas de las restricciones para quienes reciben subsidios. Sin embargo, se mantiene la percepción del 30% para consumos con tarjeta en el exterior y gastos turísticos.

Asimismo, se eliminará el dólar blend y el plazo obligatorio de 30 días para el pago de importaciones. En su lugar, se aplicará un nuevo esquema de flotación del tipo de cambio dentro de una banda de entre $1000 y $1400. Si el precio del dólar supera esos límites, el Banco Central intervendrá. Las bandas se ajustarán un 1% mensual.

Compromisos clave ante el FMI

El acuerdo exige al Gobierno cumplir con nuevas metas, entre las que se destacan:

• Alcanzar un superávit primario del 1,6% del PBI este año, lo que implica un ajuste adicional del 0,3% respecto a lo inicialmente previsto.

• Acumular reservas internacionales netas: de US$4900 millones en marzo, deben pasar a US$4000 millones positivos a fin de año.

• Avanzar con una reforma impositiva que elimine tributos distorsivos y simplifique el sistema, además de reducir gastos ineficientes. Esta reforma debería comenzar en 2026 y requiere aval legislativo.

• Impulsar una reforma previsional para lograr un sistema más equitativo y sostenible, que contemple una mejor relación entre aportes y beneficios, y fomente la formalización laboral.

Durante la conferencia de prensa, Caputo destacó que el incremento del esfuerzo fiscal busca blindar la economía ante eventuales crisis externas. Por su parte, Bausili explicó que el crecimiento económico actual necesita “más combustible”, ya sea en pesos o en dólares, y que esa demanda podría derivar en una mayor acumulación de reservas.

Ambos funcionarios remarcaron que la economía argentina está en condiciones de “remonetizarse” —es decir, aumentar el uso de dinero en circulación— gracias a la solidez del plan. Este proceso, aseguraron, será clave para sostener el crecimiento y mejorar la recaudación.