El futuro de YPF

Es una etapa de soberanía y júbilo que deseo compartir con los lectores. La expropiación de la mayoría accionaria de YPF es recuperar para nuestra Nación una herramienta imprescindible para nuestro desarrollo.

La energía tiene un valor estratégico. La mayoría de los países del mundo tienen sus empresas energéticas administradas por el Estado. La Argentina la perdió por concepciones neoliberales en la etapa de la dictadura militar y posteriormente en el menemismo.

Ningún país del mundo deja toda su economía en decisiones del "mercado", sino que en sectores clave el Estado regula y/o administra.

Las privatizaciones que se hicieron en la década del 90, en casi todos los casos fueron nefastas para el pueblo argentino. YPF fue el ejemplo:

* No garantizó que nuestro país se autoabasteciera; en  2003 se importó por U$S 508 millones; en 2011 se importó energía por U$S 9.397 millones.

* No se abasteció adecuadamente de combustibles las necesidades de la población en el mercado interno.

* Transfirió a la central de España U$S 41.000 millones entre 2001 y 2010; esos recursos fueron invertidos en otros lugares del mundo donde Repsol tiene intereses y en territorio español de donde es originaria la empresa.

* Redujo las reservas de gas en 56%. Las mismas alcanzaban en 1998 a 15,7 años y en 2010 a 7,3 años.

* Las reservas de petróleo descendieron de 1.343 millones de barriles a 666 millones actuales.

* No realizó las inversiones en exploración comprometida en las concesiones que se le habían otorgado.

* En el período 1998 - 2011 la caída de la producción de petróleo fue de 54%.

* En el período 1998 - 2011 la caída de la producción de gas fue de 97%.

En la mayoría de los países productores de hidrocarburos, sus empresas líderes son conducidas con mayoría de participación de los Estados. Ello no ha dificultado que diversas empresas petroleras privadas efectúen inversiones y obtengan su rentabilidad adecuada. Además, pagan regalías mayores que en nuestro país y sin embargo se interesan en continuar con ese sistema.

Algunas opiniones que se oponen a la expropiación de YPF, expresan sus temores de que no habrán inversiones. La decisión de invertir tiene en cuenta los beneficios que se obtienen y la seriedad de los países.

El nuestro es un país serio y, por consiguiente, no quedará marginado como lo es en otras actividades industriales, donde el crecimiento es uno de los mayores del mundo.

No será fácil la etapa que se avecina. Son necesarias importantes inversiones para explotar y extraer hidrocarburos en el mar o no convencionales - shale- confinados en rocas y/o arenas.
Varios años se ocuparán para lograr el autoabastecimiento. El camino está trazado, ahora queda transitarlo.
Las opiniones vertidas en este espacio, no necesariamente coinciden con la línea editorial de Diario Los Andes.