El final de Benjamín Vicuña en Farsantes: Por qué SÍ
Vamos a tomar por hecho que todos saben ya que a Pedro lo mandan para el otro lado por irse antes. Si puede venir Hannibal Lecter, que se lo coma.
1 - Porque si se va, que lo maten. Así de simple. Por ingrato.
2 - Al final Pedro resultó un pesado. Nada que tenga que ver con su conflicto de identidad, que no se mal interprete. Pero esa cara de sufrido mimoso revoleando los ojitos que si que no, que blanco que negro, ya nos pudrió.
3 - Porque Benjamím Vicuña es un gran actor pero pertenece a esta generación que se te va antes de la novela, le sale un viaje, quiere grabar para la HBO, para la NBC, para la CNN y hacer teatro, gira y tener tiempo para jugar al paddle. Si sos protagonista tenés una reponsabilidad con tu público, ¡qué tanto!
4 - Porque si avisó que se iba antes de Farsantes, así como las productoras ponen ese cartelito insistente que dice que "los hechos son de ficción, cualquier semejanza es mera coincidencia", debieron poner un cartel que diga "señores; el protagonista se va en el capítulo 80, no se ilusionen; a llorar a la Iglesia".
5 - Según se supo, a Pedro lo mata la mujer, Camila (Cardinali) indignada porque se enamoró de Guillermo (Julio Chávez). Aquí proponemos cómo podrían acabar con él otros personajes de la novela: Gabriela (Griselda Siciliani) lo mata porque miró con codicia a Suar en un aviso de Solamente vos. Personaje y actriz se le cruzaron en un mal día y ¡pum!. Alberto (Facundo Arana) lo encuentra correteándolo en el vestuario del club y antes de tentarse lo derriba de un susurro. La ex de Chávez (Pellicori) lo invita unos tragos, se ponen en pe... y mueren en un coma alcohólico. Casero lo pelea por un sanguche de mortadela y lo asesina por hambre. Leonor Manso, indignada porque a ella la mataron en El elegido, cobra venganza y lo pisa con un auto. Ojo por ojo, diente por diente.