El fenómeno de las latas en Argentina: ¿por qué la gente consume novelas extranjeras?

Luciano Fryszberg

Jefe de Redacción - @Luchofry

Por Luciano Fryszberg

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Los canales de televisión abierta eligieron en los últimos años volver a las "latas", envalentonados con el éxito de "Avenida Brasil", "Las mil y una noches" y, hoy en día, "Moisés y los diez mandamientos". Estas superproducciones llegaron en tiempo de vacas flacas a una pantalla que exige todo el tiempo altos números de rating. ¿Por qué el público elige estas producciones? La opinión de Claudio Villaruel, Pablo Sirvén y Moskita Muerta.

¿Qué es una lata en la televisión?

Una "lata" es una producción realizada para un mercado específico que luego es vendida al exterior a costos muy inferiores al precio del mercado de origen. Generalmente estos mercados de origen, son países con una industria televisiva desarrollada, que cuenta con millones de televidentes y presupuestos publicitarios enormes comparados con los de los países más pequeños como el nuestro.

Lo único que importa es el rating - Programan con la calculadora en la cabeza

La televisión abierta argentina (El Trece, Telefe, América, Canal 9 y TV Pública) se ocupó de rastrear por los cinco continentes cuales son los posibles fenómenos que pueden llegar a gustar a los televidentes. Lamentablemente, los canales toman decisiones con el bolsillo y no con la cabeza. Traer una novela del exterior termina siendo mucho más económico que hacer una producción local. Nadie apuesta a que una idea innovadora pueda llegar a ser un éxito en nuestro país y, obviamente, después tener llegada al mundo.

Los canales no pueden, por una mala situación económica, embarcarse a llevar un programa como una ficción si no tienen una señal del mercado para que sea rentable. Además, la nueva manera en que el público consume la televisión influye en cómo se programa. Existen nuevas pantallas y el televidente se acostumbró a ver de otro modo: on demand, premium, grabar y ver.

En lo que a costos refiere, se estima que la hora de una ficción local costaría unos 60 mil dólares, mientras que la de una novela turca, U$S 7 mil, y una surcoreana, U$S 2.500. Las repeticiones de "Los Simpson", "El Zorro" o "El Chavo" no tienen costo para los canales y por eso lo vemos todo el tiempo en los canales.

¿Por qué el público consume masivamente las novelas extranjeras y qué consecuencias puede traer en las producciones locales? Opinan Claudio Villaruel, Pablo Sirvén y Moskita Muerta.

Claudio Villaruel

"El tema de las latas que llegan del exterior no tiene que ver con una cuestión artística. Claramente es por un tema económico. Una hora de una lata que viene del exterior puede salir desde U$S 1000 hasta U$S 10.000. En cambio, una producción nacional (actores, guionistas y producción) puede salir U$U 60.000. Hoy en día nadie arriesga en la televisión argentina. Y no sé por qué. Debe ser porque hay una chatura o falta de ganas. Van a lo seguro. Los canales saben que si no les rinde una lata de 20 capítulos que compraron a U$S 5.000, la cambian de horario o la dejan de pasar y listo. Igual creo que es un arma de doble filo porque si vos seguís poniendo latas en los primetime (franja horaria de 20 a 24) empezás a matar la ficción argentina. Por lo tanto, ya en el mundo no nos ven como una usina creativa. Antes lo éramos. Ahora no existimos como generadora de contenidos. Hoy terminamos comprando en el extranjero novelas de hace 20 años. Creo realmente que tiene que ver con una falta de voluntad de arriesgar. Tendría que ser un setenta por ciento de ir a lo que pensás que es seguro y un treinta de riesgo. Es una cuestión de que prefieren resultados rápidos y seguros. Las decisiones se toman más sobre planillas Excel donde se maximizan las ganancias y no se piensa tanto en la audiencia. Por eso la televisión en los últimos 12 años perdió un 40 por ciento de la audiencia que se fue a otros lados. Un primetime si sumabas los canales de aire hace diez años atrás te daba 50/55 puntos de rating. Hoy te da 32 puntos con suerte. La televisión no está viendo eso. Solo mira su propio ombligo y como maximizar las ganancias hoy y en el futuro después se verá. Creo que es un gran error que está cometiendo la televisión y que la puede pagar muy caro. El público consume lo que hay. Si uno se esfuerza en hacer un producto con creatividad argentina el público va a tener el mismo o más interés. Yo erigiría hacer producciones nacionales con talento argentino y valor agregado argentino. Son decisiones políticas que toman los programadores.  Si vos haces un buen producto lo podés vender en el mundo y ahí vas a recuperar y ganar mucho de lo que invertiste".

Pablo Sirvén

"Creo que los canales llegan un poco por casualidad y por necesidad, más que por convicción, a las latas. En la televisión privada de los años 60 había un mix de producción local con latas, pero del 90 para acá las latas se fueron corriendo de la TV abierta al cable. A partir de la crisis, fines de los años 90, las ficciones locales empezaron a replegarse y a partir de la explosión de 2001, la pantalla se llenó de paneles. Desde que la economía viene en declive -ya en los últimos años del gobierno de Cristina Kirchner y más pronunciada en estos primeros pasos del gobierno de Macri-, los canales vuelven a recurrir a las latas para ahorrar. Y de casualidad descubren fenómenos impensados (Avenida Brasil, Las mil y una noches, Moisés, las latas coreanas, etc). ¿Por qué funcionan? Porque son más exóticas y bien distintas que algunas fórmulas remanidas locales, traen un poco de aire a nivel argumental, se ven otras caras, otras maneras de narrar".

Moskita Muerta

"Las latas son infinitamente más económicas que producir una novela o tira acá, entonces los canales por una cuestión presupuestaria acuden a ellas. Además, en general están hechas con mucho más dinero por capitulo que lo se hace acá en Argentina. Por ejemplo, un capitulo de "Moisés y sus diez mandamientos" tiene un costo de casi U$S 250.000 el capitulo mientras que con ese numero acá se hace una semana de tira. En cuanto al gusto del público, eso es cíclico, yo creo que en los últimos años "Avenida Brasil" o "Las mil y una noches" ocuparon el lugar del culebrón que estaba vacío. Ese lugar que dejaron las novelas al estilo Migre. No por nada la ficción nacional más vista es "Los ricos no piden permiso".