El falso milagro del Cristo que mueve la cabeza
Sigue circulando un video denominado "¡impactante!", pero no lo es y te explicamos el motivo.
La previa a la reciente Vigilia Pascual vino acompañada por un video mexicano que rápidamente se viralizó y del cual muchos medios periodísticos se hicieron eco. Se trata de una filmación de muy mala calidad que fue registrada durante un ritual católico en la parroquia de Santa Ana Tepetitlán, en el municipio de Zapopan, Jalisco. Con mucho esfuerzo y buena voluntad se puede apreciar -a los pocos segundos de iniciado el video- que se produce un leve movimiento descendente de la cabeza del Cristo crucificado.
Revuelo e información contradictoria
Lo primero que me llamó la atención no fue precisamente el movimiento de la cabeza de la estatua sino las supuestas declaraciones del párroco que estaba presente cuando se produjo el hecho. Muchos medios informaron que el Padre Juan Antonio Guerra Lule habría declarado que fue "un milagro". Así fue que, antes de pasar al pobre cura por mi "trituradora", intenté chequear ese dato y descubrí que no era verdad. Es más, sólo habló de "una acción bonita" y de un movimiento "natural", "ordinario" y "normal".
También aclaró que cuando se refiere a acción bonita no es más que una coincidencia del movimiento con la última palabra del rezo. Y lo no sobrenatural quedó perfectamente explicado por el deterioro de la antigua estatua y flaqueo de los amarres de cuero que sostenían erguida la cabeza.
Habiendo dejado en claro que no fue un milagro, hubiese sido pertinente agregar que esa estatua es articulada como muchas otras que se conservan en otras iglesias y con similar antigüedad. El "Cristo del Descendimiento", que es el protagonista del video, precisamente siempre ha sido uno de los preferidos para articularlo con cabeza y brazos móviles y "darle vida" ante los ojos de los feligreses [Hernández Plaza, Alejandra (2015) Cristos articulados. Una escenografía para el Triduo Sacro en la Baja Edad Media. Témpora Magazine, 6 de Mayo, Sevilla, España].
El paso del tiempo provoca un natural deterioro de estas estatuas y muchas veces debe ser compensado con el arduo trabajo de los restauradores. Un buen ejemplo de este arte lo podemos apreciar en la restauración de este tipo de imágenes en Perú. El trabajo fue encargado en 2013 por la congregación de los Hermanos de la Soledad al equipo del Museo Pedro de Osma.
En síntesis, el verdadero milagro sería que las "estatuas milagrosas" dejaran de ser noticia, pero en cuanto a eso ya he perdido la fe.