Policiales
El empresario descuartizado: muchos sospechosos, pocas certezas
La Justicia de Lomas de Zamora le pidió a la Justicia Federal de Morón, que lleve a la cárcel a Julio Michel Katzman, que tuvo una concesionaria de auto de alta gama junto a Fernando Pérez Algaba, en Ramos Mejía.
Se pidió información al Juzgado Federal N°2 de Morón, se quieren conocer los detalles de la relación entre el comerciante y el empresario asesinado y descuartizado cuyo cuerpo fue encontrado en Ingeniero Budge, con Julio Michel Katzman, un empresario que ese juzgado procesó por narcotráfico en noviembre del año pasado.
Entre 2018 y 2019, Katzman, hoy preso, y Pérez Algaba, instalaron una concesionaria llamada Hummer Motors, sobre la avenida Rivadavia, en Ramos Mejía, sociedad de palabra, que nunca estuvo escrita en los papeles y que luego fue disuelta.
Se quiere saber si “Lechuga”, tal como se conocía al malogrado empresario, estaba imputado en el mismo expediente que Katzman. No se sabe si éste y su organización son sospechosos del crimen. No hay por ahora evidencias que apunten directamente a ellos, es algo que se desconoce.
Pérez Algaba tenía frentes abiertos en su vida comercial. Los investigadores coinciden en que “eran muchísimos”.
"Lechuga" había sido denunciado por estafa en el Juzgado N°3 porteño, era asediado por acreedores de sus pagarés en dólares con demandas por cobro ejecutivo y fue supuestamente amenazado por barrabravas.
En la causa narco de Morón, se identificó al presunto jefe de Katzman, Esteban Tulli, alias “El Zapatero”. El empresario de 51 años, socio de una firma dedicada en los papeles a la fabricación de calzado fue detenido a fines de septiembre de 2022 en una redada masiva de la Delegación Ezeiza, de la Superintendencia de Drogas Ilícitas de la Policía Bonaerense.
Lo encontraron en un country de Pablo Podestá, donde se movía con una Mercedes Benz Sprinter. Tulli, según la investigación del Juzgado Federal N° 2 de Morón, encabezaba el financiamiento y la ingeniería de lavado de una banda que buscaba penetrar el negocio transa villero, con jugadores en asentamientos de La Matanza como Villa Palito, el Barrio 4 de Junio de Avellaneda, Villa El Tropezón, Villa Tranquila, la 9 de Julio y la 18. En el operativo, la policía encontró una avioneta bimotor Pipper, a cargo de Katzman, subalterno de Tulli, que también terminó preso.
Esa avioneta, creen los investigadores, no fue comprada para ver el mundo desde arriba, sino para transportar polvo. Hubo 13 detenidos en esos allanamientos; la lista de implicados en la banda tiene más de 30 nombres. Les encontraron autos de marcas como Porsche o Audi, casi 6 millones de pesos, 78 mil dólares, 2 kilos de cocaína, más de tres mil pastillas de éxtasis, 12 armas de fuego.
Como podrá observar, todos buenos muchachos, y vinculados a actividades, cuanto menos dudosas y que le llevaran varios años de prisión. Se puede observar que ninguno trabajaba en cosas licitas, con lo cual el destino de Pérez Algaba, de una u otra forma estaba sellado.
El que mal anda, mal acaba…
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