El drama de una pasajera de Once
Florencia Ilbaca, de 23 años, estuvo varias horas entre los hierros retorcidos del primer vagón, y deberá ser operada por décima vez por el accidente.
"Mi hija tiene las dos piernas lesionadas pero la izquierda es la que está comprometida. Psicológicamente está destruida. Estuvo cuatro horas atrapada por una de las barandas del vagón, tapada por cuerpos de otros pasajeros", contó, con dolor, Víctor, padre de la chica.
Dos personas continúan internadas producto de las heridas provocadas por el choque de Once, según informó el Ministerio de Salud porteño. Se trata de Florencia Ilbaca y Leonardo Sarmiento (30), alojado en una sala del Hospital Santojanni.
Oriunda de Mar del Plata, Florencia vive sola en Moreno y trabaja en un local de indumentaria de Once. El 22 de febrero pasado había tomado el Sarmiento como todos los días pero al llegar a destino se encontró con la tragedia. "Siempre me decía que los trabajadores viajaban como ganado, con las puertas abiertas y los vidrios de las ventanas rotos. Y sin medidas de seguridad: el día del accidente estaban todos los pasajeros amontonados en los vagones", le relató a Popular el hombre que llegó desde la ciudad balnearia para acompañar a su hija.
Indignado por la falta de respuesta de las autoridades, el padre se quejó porque en el último mes "nadie golpeó la puerta para ayudarme. Ni el gobierno nacional ni la empresa TBA. Estamos haciendo todo a pulmón: somos de Mar del Plata, no tenemos lugar donde alojarnos y nos cuesta mucho pagar el hotel. Aunque hoy (por ayer) me llamaron del Ministerio de Desarrollo Social prometiéndome una pensión para mi hija, hasta ahora no tengo nada".
Mañana Florencia va a ser intervenida nuevamente por el equipo del Hospital Pirovano. "Es como la décima vez que la operan. Es que cada 48 horas deben intervenirla para ver si pueden salvar su su pierna: remueven tejidos muertos para que no se produzca una infección. No le queda piel y poco tiene de músculo. Había quedado atrapada en el primer vagón. Estuvo cuatro horas debajo de toda la gente hasta que fue trasladada en helicóptero al hospital", recordó Ilabaca.
Víctor reconoció la labor de los profesionales del Pirovano. "Con los medios que tienen hacen lo imposible para curar a mi hija. Pero sé que hay lugares especializados en este tipo intervenciones y quizás sería mejor una derivación. Pero para eso necesitamos ayuda", admitió.
La familia está concentrada en la salud de Florencia y, por ahora, no fija su mirada en el accionar de la justicia. De todos modos, Víctor se mostró escéptico sobre el devenir de la investigación judicial del choque de la estación Once. "Creo que la causa no va a terminar en nada. Estando el gobierno en el medio ningún funcionario va a ir preso. Es una farsa: a lo sumo el que va a pagar por esta tragedia va a ser el maquinista", opinó sobre el proceso que se tramita en el Juzgado Nacional Criminal y Correccional Federal Nº 11, a cargo de Claudio Bonadío.
El abogado Gregorio Dalbón, quien patrocina a 150 víctimas del siniestro, también cuestionó la investigación que encabeza el magistrado al que denunció por "prevaricato" por exigir una caución de $100 millones a las víctimas que se presentaron como querellantes en la causa. "Por ahora el accionar de Bonadío hace presagiar que la causa se encamina a quedar impune. Por eso es fundamental que la Cámara Federal se expida ante el reclamo del fiscal Delgado (ver aparte) por retardo de justicia. Si todo sigue así las defensas van a plantear nulidades que lógicamente harán caer la investigación", señaló a este medio el reconocido penalista.
El letrado denunció, además, que el juez "aceptó enseguida al Estado nacional como querellante pero después pidió informes sobre la gestión de TBA de 2007 en adelante. No puede ser que el gobierno no supiera cómo funcionaba la concesionaria. Por eso hemos pedido que se lo investigue como partícipe necesario" del desastre.
Dos personas continúan internadas producto de las heridas provocadas por el choque de Once, según informó el Ministerio de Salud porteño. Se trata de Florencia Ilbaca y Leonardo Sarmiento (30), alojado en una sala del Hospital Santojanni.
Oriunda de Mar del Plata, Florencia vive sola en Moreno y trabaja en un local de indumentaria de Once. El 22 de febrero pasado había tomado el Sarmiento como todos los días pero al llegar a destino se encontró con la tragedia. "Siempre me decía que los trabajadores viajaban como ganado, con las puertas abiertas y los vidrios de las ventanas rotos. Y sin medidas de seguridad: el día del accidente estaban todos los pasajeros amontonados en los vagones", le relató a Popular el hombre que llegó desde la ciudad balnearia para acompañar a su hija.
Indignado por la falta de respuesta de las autoridades, el padre se quejó porque en el último mes "nadie golpeó la puerta para ayudarme. Ni el gobierno nacional ni la empresa TBA. Estamos haciendo todo a pulmón: somos de Mar del Plata, no tenemos lugar donde alojarnos y nos cuesta mucho pagar el hotel. Aunque hoy (por ayer) me llamaron del Ministerio de Desarrollo Social prometiéndome una pensión para mi hija, hasta ahora no tengo nada".
Mañana Florencia va a ser intervenida nuevamente por el equipo del Hospital Pirovano. "Es como la décima vez que la operan. Es que cada 48 horas deben intervenirla para ver si pueden salvar su su pierna: remueven tejidos muertos para que no se produzca una infección. No le queda piel y poco tiene de músculo. Había quedado atrapada en el primer vagón. Estuvo cuatro horas debajo de toda la gente hasta que fue trasladada en helicóptero al hospital", recordó Ilabaca.
Víctor reconoció la labor de los profesionales del Pirovano. "Con los medios que tienen hacen lo imposible para curar a mi hija. Pero sé que hay lugares especializados en este tipo intervenciones y quizás sería mejor una derivación. Pero para eso necesitamos ayuda", admitió.
La familia está concentrada en la salud de Florencia y, por ahora, no fija su mirada en el accionar de la justicia. De todos modos, Víctor se mostró escéptico sobre el devenir de la investigación judicial del choque de la estación Once. "Creo que la causa no va a terminar en nada. Estando el gobierno en el medio ningún funcionario va a ir preso. Es una farsa: a lo sumo el que va a pagar por esta tragedia va a ser el maquinista", opinó sobre el proceso que se tramita en el Juzgado Nacional Criminal y Correccional Federal Nº 11, a cargo de Claudio Bonadío.
El abogado Gregorio Dalbón, quien patrocina a 150 víctimas del siniestro, también cuestionó la investigación que encabeza el magistrado al que denunció por "prevaricato" por exigir una caución de $100 millones a las víctimas que se presentaron como querellantes en la causa. "Por ahora el accionar de Bonadío hace presagiar que la causa se encamina a quedar impune. Por eso es fundamental que la Cámara Federal se expida ante el reclamo del fiscal Delgado (ver aparte) por retardo de justicia. Si todo sigue así las defensas van a plantear nulidades que lógicamente harán caer la investigación", señaló a este medio el reconocido penalista.
El letrado denunció, además, que el juez "aceptó enseguida al Estado nacional como querellante pero después pidió informes sobre la gestión de TBA de 2007 en adelante. No puede ser que el gobierno no supiera cómo funcionaba la concesionaria. Por eso hemos pedido que se lo investigue como partícipe necesario" del desastre.