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El contrato

*Por Gerardo BIlardo. Sapag, preocupado por las cenizas y las elecciones pendientes. La reconversión de la economía, una deuda que arrastra el MPN.

Los dos principales temas de preocupación en el gobierno de Jorge Sapag giran alrededor de la emergencia derivada de la erupción de cenizas del volcán Puyehue, con las graves consecuencias para el sur de la provincia, y las cinco elecciones municipales que quedan pendientes, entre ellas la de la ciudad de Neuquén que sigue sin fecha.

El listado de prioridades de la gestión la dio este fin de semana un integrante del equipo del gobernador que, al igual que su jefe, relativizó la posibilidad de que Sapag esté pensando hoy en el armado del gabinete que lo acompañará a partir del próximo 10 de diciembre. "No es ése un tema que tenga relevancia y si así fuera sólo él lo sabe y, en tal caso, no lo comparte con nadie", agregó la fuente consultada.

Este diario publicó esta semana versiones que surgieron del propio oficialismo sobre posibles reacomodamientos en el gabinete para acompañar a Sapag en el nuevo turno de gobierno que comienza a fin de año.

El dato más preciso en torno a estas especulaciones sería el referido a la salida de Daniel Vincent, ministro de Salud, que está en condiciones de jubilarse. La cartera que dirige, además, aún no pudo solucionar la conflictividad laboral que lleva varios meses.

Otros cambios involucrarían a las áreas de Hacienda, Educación, Coordinación y al Banco de la Provincia de Neuquén. Además podrían ocupar espacios de mayor exposición algunos funcionarios de mucha confianza de Sapag, como Guillermo Coco, actual secretario de Recursos Naturales, y pieza central en el manejo de la política petrolera.

El lunes, después de un acto oficial, Sapag respondió sobre el tema sin ocultar su fastidio por la pregunta. En su breve declaración ratificó a su actual gabinete y dijo que todavía no pensó en ningún cambio para el futuro.

Cuando asumió en el 2007, el gobernador presentó a su equipo de colaboradores con poca anticipación. En algún momento de aquí a diciembre tendrá que informar qué funcionarios lo acompañarán para cumplir con la plataforma electoral.

En ese contrato con la sociedad, el de la plataforma, Sapag dice que va a fortalecer el sistema de salud y a incorporar escuelas a la modalidad de jornada extendida. También que llegará con internet a todos los colegios rurales y comunidades mapuches y que, a partir del Foro Educativo que está en marcha, se elaborará una nueva ley de Educación. En el ámbito judicial, su próxima gestión va a fortalecer la "independencia funcional e imparcialidad" de ese Poder del Estado y creará el Consejo Provincial de Derechos Humanos.

En política para los jóvenes se activarán acciones que tendrán un "orden primario" para lograr que terminen la escuela secundaria. Se trata de un objetivo complejo en una provincia donde la deserción en el Nivel Medio es del 60%. Además, el futuro gobierno de Sapag creará un hogar del estudiante en la capital para los alumnos universitarios del interior e instrumentará un boleto estudiantil provincial.

Hay un compromiso para mejorar la calidad de empleo en el servicio doméstico "promoviendo la profesionalización y jerarquización" del oficio, y otro para incluir a las mujeres en ámbitos de decisión gubernamental.

En materia de política habitacional hay que esperar, además del sostenimiento de los planes tradicionales, la instrumentación de créditos individuales a propietarios de terrenos para fomentar la autogestión de construcción de casas y un aumento en la oferta de loteos sociales con servicios.

En el próximo gobierno provincial, las empresas que prestan servicios públicos seguirán siendo estatales, al igual que la caja de jubilaciones y pensiones que se administran a través del Instituto de Seguridad Social de Neuquén.

El contrato del MPN establece que ya no se podrán arrojar al río efluentes cloacales sin tratamiento y promete instrumentar "todas las medidas necesarias para la protección ambiental".

En cuanto al presupuesto, el próximo gobierno dice que le dará participación "a diferentes sectores de la sociedad" en la construcción del proyecto y en el control de la ejecución. También menciona que rendirá cuenta "permanentemente" de la evolución de las finanzas públicas "para asegurar la transparencia y el control ciudadano de la gestión".

Sobre el destino de los recursos, la plataforma asegura que el próximo gobierno del MPN va a tratar de "disminuir el peso de las partidas de personal, contribuciones a municipios y pagos de deudas, que en su conjunto alcanzan un 75% del presupuesto, para destinar más recursos a los gastos de inversión".

Es posible que los municipios finalmente tengan un nuevo régimen de coparticipación, ya que el compromiso asumido consiste en impulsar un acuerdo con los intendentes para modificar la legislación vigente.

El negocio de la madera

El próximo gobierno prepara un proyecto para potenciar el desarrollo forestal, ya que Sapag buscará inversores "en países industrializados". La plataforma dice que la provincia cuenta con 600.000 hectáreas de bosque nativo, idéntico número de tierras aptas para forestar y 55.000 hectáreas ya plantadas con salicáceas y coníferas.

La construcción de la presa de Chihuido es la frutilla del postre en materia de movilización de la economía y generación de fuentes de empleo, con la promesa de creación de 5.000 puestos de manera directa e indirecta. Tan importante es el desarrollo de este proyecto que es un sub-ítem en la plataforma electoral.

El plan que presentó Sapag ratifica el perfil petrolero y gasífero de la provincia, pero al mismo tiempo reconoce que "debe ser una prioridad" el desarrollo agrario sostenido porque "no es posible un progreso genuino con crecimiento económico basado solamente en la extracción de recursos no renovables".

En especial esta última promesa fue hecha por cada uno de los gobiernos del MPN, un partido que hace 50 años maneja el poder en esta provincia.