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El árbitro de Argentina-Islandia que tiene un malo historial de antecedentes con Messi

El polaco participa por primera vez en un Mundial. Es poco propenso a sacar tarjetas.

Un debutante en Mundiales, polaco de 36 años, será el árbitro para el debut de Argentina frente a Islandia, este sábado a las 10. La FIFA dio a conocer este jueves las designaciones arbitrales para los partidos del sábado, entre los que se encuentra el de Argentina. Szymon Marciniak, polaco de 36 años, fue el el elegido por el Comité de Arbitros y es su primera participación en esta competencia.

Oriundo de Plok, una ciudad asentada a orillas del río Vístula, es árbitro FIFA desde 2011 y lleva dirigidos unos cuantos encuentros internacionales de Champions y Europa League, Eurocopa y Mundial Sub-20.

Los más significativos de todos ellos para Lionel Messi, la gran esperanza de Argentina para llegar lejos en esta copa, ocurrieron en la Champions 2016/17 y son muy malos.

Primero dirigió el PSG 4-Barcelona 0 por los octavos de final, aunque sin grandes cuestionamientos. Como el Barça consiguió dar vuelta la serie con un histórico 6-1 como local, llegó a cuartos y entonces le tocó de nuevo Marciniak.

Fue en la serie ante Juventus, otra vez como visitante. En Turín, los locales -que llegarían a la final- se impusieron 3-0 y el polaco ignoró un clarísimo penal por mano de Chiellini.

También protagonizó una fuerte polémica en el choque de ida de octavos de final entre Juventus y Tottenham por la Champions de este año, al no sancionar una clara falta dentro del área de Vertonghen a Douglas Costa.

Sus números indican que no es un juez propenso a mostrar tarjetas. Ha sacado 1346 amarillas en 350 partidos en todas las competiciones, lo que da un promedio de cuatro amonestaciones por encuentro.

Su promedio de faltas sancionadas por partido en la Champions -dirigió cuatro- es de 27,5. De faltas por entradas fuertes, 0,89. De penales por partido: 0,5. Amarillas por partido: 4,25. Y no sacó ninguna tarjeta roja.

Fue cuarto árbitro el 16 de mayo último en Olympique de Marsella 0-Atlético de Madrid 3, por la Europa League, en su designación más relevante de los últimos partidos.