Edesur y otra vuelta de rosca: quita si, expropiación no

Fabián Medina

Economista.

Desde que allá por los principios de la década del ’90 se privatizaron las empresas públicas en nuestro país siempre hubo problemas que se fueron medianamente solucionando con los servicios que debían prestar, aunque lo más complicado siempre fue la parte de la energía eléctrica. En este sentido, al dividir la zona metropolitana (Capital Federal/CABA y conurbano/GBA) en norte y sur, se generó una muy clara distinción entre las empresas adjudicatarias de EDENOR y EDESUR. 

Entre ellas la peor parte en cuanto a servicios, la sufren históricamente los usuarios de EDESUR que con todos las tarifazos que tuvieron en estos 30 años siempre mantuvieron un esquema de energía eléctrica en base al dólar tal como era el esquema original de las década del ’90 en el cual la convertibilidad era de $1 = U$S 1, pero ante esta desajustada situación y como resultado que la convertibilidad concluyó en 2002 hubo un proceso de subsidios del Estado Nacional desde ese momento hasta 2018 y desde 2019 por parte de CABA y BS AS para lo cual en ese año la Nación giró los fondos necesarios para el pago de esos subsidios.

Por ende, ambas empresas NUNCA dejaron de cobrar el valor internacional del contrato de concesión de principios de la década del ’90. Para que lo tengamos en cuenta tanto en 2018 como en 2019 el Estado abonó cerca de $300.000 millones de subsidios manteniendo los importes de 2017, con el agravante que desde 2016 el gobierno les permitió a través del Ministerio de Energía y su Ministro -hoy procesado por los tarifazos aplicados hasta 2018- Juan José Aranguren los aumentos de tarifas directamente a los usuarios en el orden del 2300% a pesar de las sentencias de la CSJN sobre el tema.

Desde la asunción del actual gobierno la empresa EDESUR no aceptó en ningún momento realizar inversiones ni sentarse a hablar de las inversiones o tarifas y como arreglar el tema de la prestación sin corte de sus servicios a los usuarios.  Ante esta situación y viendo toda la realidad acaecida desde mucho tiempo atrás es que los Intendentes del Conurbano bonaerense le solicitan al Ente Nacional Regulador de Electricidad (ENRE) y al Gobierno nacional que se de la baja de la concesión de la empresa prestadora. En forma conjunta con esto, quien suscribe cree fervientemente la necesidad que tanto los servicios de electricidad como el gas a domicilio debe ser declarado “servicio público esencial” mediante el art 42 de la Constitución Nacional modificando las leyes 24065(luz) y 24072(gas) para que los valores de ellos se manejen plenamente en pesos y no ya en dólares estadounidenses.  Con esa diferencia se podría obtener energía eléctrica y gas natural domiciliario a costos argentinos, solo que la diferencia fundamental es que deberían ponerse a trabajar seriamente en la estructura de costos propia y ay no copiar la internacional y luego pesificarla.

Desde principios de 2019 la parte de subsidios económicos a la energía pasaron de la órbita nacional a la de CABA y BS AS, mediante un mero pase contable, otorgándole para que no se quejen los fondos necesarios para cubrirlos. Esos subsidios eran cerca del 50% del déficit fiscal nacional y hoy siguen vigentes como consecuencia de las negociaciones que realizó el Estado Nacional con el FMI para mostrar un déficit fiscal menor al 1%.

Como consecuencia de todo esto explicado, la desidia y la ya colmada situación de los vecinos e Intendentes cuando en breve la Secretaría de Energía vuelva a convertirse en Ministerio, la resolución de este tema no debe ser la EXPROPIACIÓN de la empresa sino realizar una quita de la concesión vigente como consecuencia del incumplimiento de contrato tanto en la parte de infraestructura que, incluso se comprometieron en las audiencias públicas desde 2016 a la fecha, como en la prestación de servicio a los usuarios que poseen como rehenes cautivos desde ya casi 30 años. Para recordar mejor el tema, hagamos memoria que en 15 de junio de 2019 tuvieron a todo el país en vilo por casi 24 horas pero EDESUR tuvo barrios enteros sin suministro por mas de 20 días consecutivos existiendo electrodependientes y personas con necesidades especiales que no pueden obtener una mejor calidad de vida sin determinados elementos.