Echaron a Roger Waters de la discográfica BMG por sus declaraciones sobre Israel, Estados Unidos y Ucrania

La controversial postura de Roger Waters continúa pasándole factura. A la caída de fechas de algunos shows, y al no querer ser recibido por varias cadenas hoteleras internacionales, se le suma que el músico británico se quedó sin sello discográfico: BMG rompió su vínculo con el exlíder de Pink Floyd.

Sí, la compañía musical alemana decidió romper lazos definitivamente con el músico tras una serie de declaraciones señaladas como antisemitas con respecto a las posturas bélicas de Israel, Ucrania y Estados Unidos.

Según confirmó el sitio especializado Variety, la salida de Waters no será el único cambio profundo que tendrá la disquera alemana tras la llegada de Thomas Coesfeld, nuevo jefe ejecutivo de la compañía. Eso sí, la desvinculación de Waters es la que más ruido hace.

El acuerdo entre BMG y Waters se firmó en 2016 e incluía originalmente planes del lanzamiento de una versión recientemente grabada del aclamado álbum de Pink Floyd de 1973, Dark Side of the Moon (El lado oscuro de la luna).

Pero, con la llegada de Coesfeld, quien asumió el 1° de julio del año pasado, dicho proyecto se cayó y el acuerdo con Waters empezó a tambalear por su radical postura en temas sensibles y polémicos.

Así, Waters sacó el material, pero sin BMG. El trabajo discográfico salió a través de un sello británico mucho más chico, Cooking Vinyl. Una decisión que sumo rispidez entre BMG y el músico.

Fue el propio Waters que previo a su paso por Argentina, en una entrevista con el periodista Glenn Greenwald, deslizó la posibilidad de "despido" de su sello discográfico por las posturas antagónicas en temas políticos.

Allí, también aclaró que tras su decisión de sacar el proyecto en otro sello discográfico, hizo que se suspendieran varias actuaciones que estaban previstas en el Reino Unido y Europa.

Sus propios excompañeros de Pink Floyd, encabezado por David Gilmour, están que trinan con Waters ya que sus dichos alejaron a varios pretendientes interesados ​​en adquirir el catálogo de música grabada por la banda, valuado en una cifra cercana a los 500 millones de dólares.