Duelo de milagreros
Un enfrentamiento sin precedentes atrajo la atención de los medios. ¿Habrá daños colaterales?
Ahora el marco parece diferente y entre ellos mismos se desafían pretendiendo demostrar que sólo uno es el verdadero mientras que el otro es un farsante. La pugna en cuestión surgió entre el pastor evangélico australiano John Mellor y el médium brasileño João Teixeira de Faria, alias "João de Deus" o "John of God" (Juan de Dios).
El inminente duelo de los "Johnnies" se produciría en Australia, siempre y cuando el brasileño acepte. Pues claro, João quiere continuar siendo profeta fuera de su tierra y ha invadido los intereses espirituales ($$$) del pastor milagrero local.
João previó, entre el 22 y 24 de noviembre, colmar las instalaciones del recinto ferial del Parque Olímpico de Sydney. Dicha convocatoria despertó la ira del pastor y lo retó públicamente a una confrontación de curaciones, manifestando que "la gente necesita saber quien es el verdadero sanador y su nombre es Jesús" [CabootureNews, 20-11-2014].
Mellor acusa a su eventual rival de aprovecharse de los sufrientes y menesterosos cobrándoles AU$ 795 (casi $6.000 de nuestra moneda) por tres sesiones. También sostiene que muchos pacientes de João han concurrido a sus reuniones porque han empeorado en su salud y encima perdieron miles de dólares.
Dios los cría y ellos no se juntan
En un rincón tenemos a un pastor evangélico que promociona "Curación y Milagros en Nombre de Jesús". Según los testimonios en su web, cuenta en su haber -en sociedad con Jesús- con curaciones de cáncer, cegueras, diabetes, Parkinson, parálisis, etc.
Por otro lado, el que deberá recoger el guante es un conocido curandero brasileño que presume ser el canal de más de una treintena de espíritus, cuya incorporación lo ayuda a tratar pacientes con diferentes dolencias, desde cáncer, SIDA, esclerosis múltiple, etc. Pero desde ya, fiel a su alias, João de Deus (Juan de Dios) siempre aclaró: "Yo no curo a nadie, quien cura es Dios".
En virtud de estos antecedentes, queda claro que los contendientes son presuntos instrumentos de poderes divinos y abordan problemas de salud sin título médico habilitante, uno amparado en la religión evangélica y otro en la espiritista pero, ambos, curanderos al fin. Y la pregunta de rigor es ¿qué autoridad moral tiene el pastor para cuestionar al médium? Es como que el muerto se asusta del degollado...
Por supuesto que estos son sólo fuegos de artificio que John Mellor disparó con fines de publicidad y aprovechando la visita del brasileño. Su verdadera preocupación es que el dinerillo que él podría sumar vaya a parar a las arcas del "invasor" extranjero. Sería muy ingenuo pensar que João de Deus aceptaría semejante reto cuando su negocio funciona de maravillas y sin importarle la envidia de colegas australianos. Además, si quisiera podría ahorrarse estos viajes ya que su empresa tiene muy bien organizados los tours para extranjeros que lo visitan por miles cada año.
Preocupación australiana
Desde que João de Deus anunció su viaje a Australia, se produjo una alerta por el tipo de "cirugías" que suele realizar y que lo han transformado en una celebridad del curanderismo a nivel internacional. Por tal motivo, la Asociación Médica Australiana (AMA) y organismos gubernamentales hicieron serias advertencias al respecto. "Soy extremadamente escéptico sobre esta persona; me cuesta ver alguna motivación que no sea su enriquecimiento personal y la de su organización. Si él intenta algunos de estos procedimientos quirúrgicos deberían ser informados a la comisión de quejas sobre salud en cualquier jurisdicción", declaró Stephen Parnis, Vicepresidente de AMA. "Cortar la piel con un bisturí e insertarlo sin esterilizar, manos sin guantes, son las cosas que me espantan como médico; estaría exponiendo a la gente a un riesgo", agregó.
Por su parte Meter Dutton, vocero del Ministerio de Salud, aconsejó: "Las personas con enfermedades graves, quienes son más vulnerables, debieran consultar a médicos calificados y no a personas cuyas afirmaciones no pueden ser verificadas." Y hasta el mismísimo Ministerio de Protección al Consumidor (NSW Fair Trading) se comprometió a tomar cartas en el asunto: "Oficiales departamentales estarán monitoreando de cerca este evento por cualquier potencial infracción y cualquier consumidor que tenga inquietudes acerca de su relación con 'John of God' puede contactarse con nosotros", aseguró Matthew Mason-Cox, portavoz del NSW Fair Trading [The Australian, 04-10-2014].
Con tantas declaraciones sugestivas, evidentemente obligaron a João y su equipo a tomar los recaudos del caso. De ahí que en sus promociones aclararon que "Sólo intervenciones espirituales tendrán lugar en este evento. Una intervención espiritual se hace sin contacto físico alguno y consiste en oraciones y concentración/meditación. No habrá cirugías físicas en este evento."
También se esmeran en señalar -a modo de aviso legal y a pie de página- que: "John of God siempre ha declarado que no cura a nadie. Entendemos que la curación es un acto de Dios. Ni John of God ni los organizadores hacen promesas u ofrecen garantías explícitas o implícitas, con respecto a resultados, curaciones u otras afirmaciones como consecuencia de haber asistido al Evento. Es más, el trabajo de John of God es de naturaleza puramente espiritual y no intenta reemplazar al tratamiento médico tradicional. El trabajo de curación espiritual es complementario a la atención médica tradicional. John of God le advierte que busque el consejo médico profesional de un doctor o profesional de la salud si usted tiene algún problema de salud. John of God también le pide que siga el consejo de su médico o profesional de la salud y los protocolos prescriptos por su médico o profesional de la salud. Si en algún momento alguna instrucción dada por John of God o los organizadores del Evento entran en conflicto con el consejo de su médico o profesional de la salud, por favor siga el consejo de su médico o profesional de la salud."
Como se puede apreciar hay una extrema insistencia en destacar que la actividad de John of God no interferirá con el médico o profesional de la salud. Evidentemente las advertencias surgieron efecto y evitaron que el curandero lleve a cabo sus famosas "cirugías".
El infierno tan temido
No es la primera vez que al manosanta brasileño se le imponen condiciones para sus visitas al extranjero. La difusión de imágenes en las que se ve a João en pleno ejercicio ilegal de la medicina con supuestas cirugías incluidas, siempre han sido motivo de inquietud y para que no lo autoricen a realizarlas.
El circo mediático del pastor versus el médium no pasará de eso, pero es buen pretexto para que, en la próxima entrega, analice con mayores detalles estas polémicas "cirugías" de João que tanto preocupan y por buenas razones.